¡Merienda! | Pizza de chocolate
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Pensar en pizza es pensar inmediatamente en ese hilo de queso derretido que queda al morderla. Pero en esta ocasión le daremos un giro delicioso e interesante a la pizza, preparándola dulce.
La pizza dulce de chocolate es una gran manera de disfrutar de un rico postre, muy original y que a todos les encantará. Hoy le presentamos la pizza de chocolate, la cual podrás acompañar de tu fruta favorita o de temporada.
Si deseas una pizza totalmente de chocolate, solo deberás reemplazar un 30% de la harina por caco amargo, y de este modo obtendrás una crujiente masa achocolatada.
Pizza de chocolate
Ingredientes para 6 personas
125 g de harina todo uso.
2 de levadura en polvo.
90 centímetros cúbicos de agua.
1 cucharada de aceite.
30 g de chocolate amargo.
50 g de chocolate para cobertura.
Frutas frescas.
Preparación
– Lava las frutas y reserva.
– Forma un volcán con la harina y en el centro hazle un orificio.
– Coloca en el orificio la levadura, el aceite y el agua tibia.
– Integra poco a poco los ingredientes húmedos con la harina, desde el centro hacia fuera.
– Amasa hasta crear una masa suave y homogénea.
– Cubre la masa con un paño limpio y déjala reposar hasta que duplique su tamaño.
– Una vez doblado su volumen, estira la masa espolvoreando un poco de harina en la mesa para que no se pegue. Procura estirarla de forma redonda, o de la forma que tú prefieras. Deberás tomar en cuenta el tamaño de la bandeja donde la hornearás.
– Una vez estirada la masa colócala en la bandeja previamente engrasada con un poco de aceite.
– Tapa nuevamente la masa y déjala leudar por 20 minutos.
– Transcurrido el tiempo, hornea la masa a 200º C por 12 minutos aproximadamente. O hasta que la parte inferior de la pizza esté algo firme, y los bordes ligeramente dorados. Reserva.
– Funde el chocolate en el microondas o a baño María.
– Cuando la pizza no esté tan caliente, unta el chocolate fundido por encima, sin llegar a los bordes y hornea por 5 minutos.
– Retira del horno y decora por encima del chocolate con las frutas rebanadas finamente.
– Sirve caliente, aunque si sirves fría, también será igual de deliciosa.
¡Buen provecho!
