Ofuro | ¿En qué consiste este tradicional baño japonés?
Agencias
Japón es un país con muchas tradiciones milenarias, algunas de las más llamativas para los ojos occidentales son las referidas a los rituales de baño y entre ellas destaca el ofuro, que no busca la limpieza del cuerpo, sino de la mente, aunque parece ser que fueron los egipcios los primeros, hace 5.000 años, que probaron los beneficios de este tipo de baños. Sea como fuere, se trata de toda una invitación a olvidarse de los problemas del día a día y desconectar de las obligaciones.
Originalmente las bañeras de ofuro eran de cedro de alta calidad que, al mezclarse con agua caliente, desprendía una serie de aromas relajantes. Sus diseños son bastante simples, rectangulares y más altas que las bañeras occidentales –de unos 60 centímetros–, y a las que se les pone una tapa para conservar el calor entre el uso de una y otra persona.
En la actualidad se construyen también con materiales como la porcelana, u otros sintéticos, porque con la tecnología se consigue mantener con más facilidad la temperatura del agua, pero requieren el uso de sales o aceites para lograr aromas similares a los que se consiguen con el cedro. Quien se anime a tener un ofuro en casa podrá encontrar los modelos más sencillos, para un máximo de dos personas, a partir de 2.500 euros.
Cómo es el ritual del baño en ofuro
El comienzo del ritual para realizar el ofuro de la manera más adecuada lo explica Paco Hernansanz, responsable de la casa rural Bigotes en Arlanzón (Burgos), donde se puede disfrutar del ofuro japonés, que afirma que “la forma tradicional consiste en darse previamente un baño para limpiar bien el cuerpo y así evitar ensuciar el agua del ofuro”.
Tradicionalmente, los japoneses realizan este aseo previo en un taburete bajo y se aclaran con agua en cubetas. El hecho de ducharse previamente se basa en que el ofuro es un momento de relax, no de higiene. Además, el compartir la misma agua con diferentes miembros de la familia exige que no se deba manchar para que puedan utilizarla los demás.
En el momento de entrar en la bañera de ofuro, Paco Hernansanz nos recomienda que “el agua ha de estar a 40˚C, y no se debe permanecer en el interior más de 15-20 minutos”.
El momento habitual para realizar el ofuro es antes de irse a dormir. Sin embargo, en cualquier instante se puede practicar, ya que no existe restricción para ello. El hecho de que tradicionalmente se haga a últimas horas del día es debido al estado de relajación que provoca, lo que ayuda a quien lo practica a conciliar el sueño más rápido y a dormir más tranquila y profundamente.
A la hora de practicar ofuro es conveniente seguir unos consejos para que la experiencia sea más provechosa y saludable. Lo primero que hay que tener claro es que no es conveniente prolongar la estancia en la bañera más de lo indicado aunque el usuario se encuentre bien; además, hay que salir antes de tiempo si se experimenta debilidad para evitar desmayos. Paco Hernansanz nos da otra indicación que resulta indispensable seguir por salud: “es conveniente hidratarse adecuadamente para evitar la deshidratación”.
Fuente: webconsultas.com