Descubre como saber cuándo te hace falta alguna vitamina

La piel del rostro es un auténtico espejo de nuestra salud, y prueba de ello son los síntomas de la falta de vitaminas que se reflejan en la dermis facial. Una mala alimentación puede llevarnos a lucir un aspecto poco saludable y, por el contrario, una dieta equilibrada se traducirá en una piel radiante. Por este motivo, si el aspecto de la piel del rostro no tiene el aspecto que deseamos, quizá deberíamos plantearnos si tenemos algún déficit de nutrientes.

Este puede ser un síntoma de que a nuestro cuerpo le falta vitamina B12. Además, la ausencia de este nutriente nos hará sentirnos más decaídos. Según los expertos, este déficit hace que se acumule un aminoácido llamado homocisteína y que puede provocar daños graves en las arterias o aumentar el riesgo de accidentes vasculares. Para evitarlo, debemos aumentar el consumo de carnes y mariscos.

La falta de biotina (vitamina B7) provoca la fragilidad y la sequedad del cabello, algo que puede ocurrir tras un tiempo tomando antibióticos. Para ingerir esta vitamina, debemos incrementar el consumo de carne, pescado, verduras, frutas, setas y legumbres. Además, si estás a dieta, es mejor que la interrumpas hasta que te recuperes totalmente. Los ácidos grasos Omega 3 también pueden ayudar a combatir este problema capilar.

Este síntoma, unido a la inflamación de los brazos o piernas, puede indicar que a nuestro cuerpo le falta yodo, un mineral que permite que el metabolismo funcione correctamente. Para solucionarlo, comeremos más mariscos, algas, productos lácteos, pan y sal yodada.

Esto puede significar que nos falta hierro y que padezcamos anemia. Si, además, nos resfriamos con frecuencia y tenemos la tensión baja, debemos poner remedio de inmediato. Para compensar la falta de hierro, debemos comer carne roja y evitar los alimentos ricos en calcio, puesto que puede hacer más difícil la absorción del hierro.

La falta de vitamina C puede provocar el sangrado de las encías, un problema que puede agravarse y desembocar en un sistema inmunitario debilitado, en dolor muscular o problemas dentales. Para contrarrestar, tomaremos cítricos, pimientos rojos y lácteos.