Consejos para reducir la retención de líquidos
Agencias
Eliminar líquidos retenidos no solo se trata de reducir el consumo de sal, sino de mejorar toda una serie de hábitos de vida. Veamos más a continuación.
Los cambios hormonales, algunas enfermedades (como la hipertensión) y otros factores pueden hacer que el organismo retenga líquidos y experimente molestias, como la inflamación de las extremidades, por ejemplo, sensación de hormigueo, dolor, etcétera.
La retención de líquidos no es una enfermedad como tal, sino un signo clínico. Su falta de tratamiento puede afectar la calidad de vida, por lo que es recomendable acudir al médico y seguir sus indicaciones. Adicionalmente puedes poner en práctica algunos consejos, como los que vamos a comentarte a continuación.
¿Qué es la retención de líquidos?
La retención de líquidos, también conocido como edema, ocurre por una alteración en el sistema circulatorio y linfático, a su vez relacionada con problemas hormonales, malos hábitos y genética. También puede ocurrir como consecuencia de:
*Menopausia.
*Problemas cardíacos.
*Periodo de gestación.
*Insuficiencia hepática o renal.
*Presión arterial alta (hipertensión).
*Síntomas de la retención de líquidos
Como ya lo hemos mencionado, el síntoma principal del edema es la hinchazón de las extremidades (sobre todo de las piernas). Sin embargo, en función de su detonante, las molestias pueden variar. Las más comunes son:
*Hinchazón del abdomen, cara y cadera.
*Rigidez en las articulaciones.
*Fluctuaciones de peso.
*Hormigueo y debilidad.
*Sensación de pesadez.
*Calambres nocturnos.
Consejos para eliminar líquidos retenidos
Además de seguir las indicaciones de tu médico, es conveniente que mantengas buenos hábitos de vida para evitar la retención de líquidos. A continuación expondremos algunos de los más relevantes.
- Incluir alimentos diuréticos en la dieta
Los alimentos con un alto contenido de agua (como las frutas) no solo ayudan a hidratar al organismo, sino que favorecen la micción, algo que sin duda ayuda a prevenir la retención de líquidos.
Algunas de las opciones más recomendadas son las siguientes: piña, sandía, melón toronja, tomate, alcachofas y espárragos, pero ten en cuenta que estas deben incluirse siempre dentro de una dieta equilibrada. Nunca como única fuente de alimento.
- Seguir una dieta saludable
Mantener una dieta equilibrada es fundamental para gozar de buena salud. Y claramente, para evitar o combatir la retención de líquidos no es necesario basarse solamente en el consumo de alimentos diuréticos.
La idea es mantener una dieta que incluya todos los grupos de alimentos, con moderación y en cantidades suficientes: frutas, verduras, cereales integrales, carnes, productos lácteos, etcétera.
Los expertos en el área de la nutrición sugieren realizar varias comidas al día, en total, unas seis. Así nos aseguraremos de mantener una dieta equilibrada y suficiente.
- Evitar alimentos ricos en sodio
Otra recomendación relacionada con los hábitos alimenticios para eliminar líquidos retenidos es no incluir alimentos ricos en sodio en la dieta. Uno de los más populares es la sal agregada. Esta sustancia, empleada para sazonar alimentos, es perjudicial para la salud del aparato circulatorio y el sistema linfático.
Debido a esto, tomarla en cantidades excesivas altera los procesos inflamatorios y produce edemas. Asimismo, aumenta la presión arterial y dificulta la función renal. Se debe tener en cuenta que el sodio está presente en:
Refrescos.
Ultraprocesados.
Bebidas industriales.
Alimentos enlatados.
Comestibles encurtidos.
Carnes embutidas y curadas.
Pan y productos de bollería industrial.
- Beber agua
Aunque se lee un poco contradictorio, teniendo en cuenta el objetivo de eliminar líquidos, beber agua favorece la expulsión de aquellos que están retenidos en el organismo. Dicha práctica estimula al sistema urinario y a los riñones.
No se trata de beber 2 litros de agua al día, sino de beber suficiente cantidad agua en función de las actividades que se realicen y otros aspectos.
- Realizar ejercicio
El esfuerzo físico contribuye al bienestar general del organismo. Este no solo ayuda a hipertrofiar el tono muscular o evitar el sedentarismo, también se encarga de expulsar todo tipo de elementos nocivos por medio del sudor.
Dentro de dicho esfuerzo, el más recomendado es el ejercicio físico aeróbico. Este fomenta la sudoración excesiva, motivo por el cual los líquidos retenidos en los tejidos comienzan a salir de forma paulatina.
También podemos plantearnos la posibilidad de iniciarnos en algún deporte, ya que, su gran mayoría requiere de esfuerzo aeróbico. Entre los más efectivos encontramos el ciclismo, la natación y el atletismo.
La actividad física es clave
Para eliminar líquidos retenidos y evitar sufrir con frecuencia de pesadez, hinchazón e incluso dolor, es recomendable mejorar los aspectos mencionados anteriormente, y a la par de ello, adoptar un estilo de vida activo.
Recuerda que en caso de tener alguna duda, siempre puedes consultar con tu médico. El profesional podrá orientarte acerca de cómo puedes mejorar tus hábitos, en función de las necesidades de tu cuerpo, tu estado de salud actual y objetivos por alcanzar.
Fuente: mejorconsalud.com