¿Cómo afecta la insulina al cerebro?
Noticias en Salud
La insulina es una hormona producida en el páncreas que regula el metabolismo de los carbohidratos (azúcares) al absorber la glucosa de la sangre en el hígado y las células adiposas (grasas), así como las células del músculo esquelético, y las convierte en glucógeno a través de la glucogénesis, explica el portal Noticias en Salud.
La insulina puede ingresar en el cerebro, ya que es transportada a través de la barrera hematoencefálica (BBB) por transportadores específicos. Generalmente, llega a regiones cerebrales clave, como el hipotálamo, la protuberancia, el hipocampo, la amígdala, el cuerpo estriado, el cerebelo, las cortezas parietal y frontal.
Consecuentemente, la insulina puede ejercer efectos neuroprotectores sobre las neuronas, así como apoyar e influir positivamente en procesos cognitivos superiores, como la atención, el aprendizaje y la memoria.
Durante el proceso de envejecimiento, hay una disminución en las concentraciones generales de insulina en el cerebro, así como una capacidad defectuosa de unión de insulina al IR-A. Esto se evidencia todavía más por la expresión reducida de IR-A y transportadores en el BBB, que se cree que está implicado en la resistencia periférica a la insulina y los niveles elevados de insulina en la periferia (hiperinsulinemia).
El riesgo de desarrollo de la enfermedad de Alzheimer aumenta hasta un 60% en personas con diabetes mellitus tipo 2. En esta enfermedad, hay una captación y un metabolismo de la glucosa cerebral mucho más bajos, junto con una disminución en la señalización de la insulina y la actividad del receptor en comparación con los adultos sanos de edad similar.