Ayayoga, una práctica japonesa que reduce la cintura
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Fortalecer el tronco es muy importante para sobrellevar de buena forma las actividades de la vida diaria. Una forma relajada y divertida para conseguirlo es el método que es furor en Japón. Sigue leyendo para conocer qué es el ayayoga y cuáles son sus beneficios.
Esta técnica de entrenamiento fue elaborada por una instructora japonesa llamada Aya, y de ahí el nombre. Se trata de una combinación de posturas de yoga mezcladas con ballet y entrenamiento de fuerza para reducir la cintura y fortalecer la musculatura de la espalda.
El ayayoga también ayudaría a elongar músculos y articulaciones, a conseguir una mejor postura y a evitar o reducir los dolores de espalda que nos aquejan.
¿Qué es el ayayoga?
Aya es una instructora japonesa y directora de un estudio de yoga llamado Syaraaya. Tras sufrir un accidente en los Estados Unidos, la mujer comenzó a practicar yoga como parte del proceso de rehabilitación.
Luego innovó con técnicas propias que dieron origen al ayayoga. Gracias a los buenos resultados en poco tiempo, su método ganó popularidad en Japón y se difundió por todo el mundo.
Las asanas clásicas de la milenaria técnica hindú para lograr un equilibrio entre el cuerpo y la mente con técnicas de respiración fueron fusionadas con el gusto de Aya por el ballet clásico y los ejercicios corporales. La joven demostró que el yoga no tiene límites, que da lugar a la imaginación y que se pueden conseguir nuevas técnicas muy efectivas.
Ejercicios principales de ayayoga y sus beneficios
Hay múltiples ejercicios que se pueden realizar al practicar ayayoga; desde los más básicos hasta las posturas más complejas. Es ideal dedicarles un rato de cada día para comenzar a notar cambios favorables en tan solo 2 semanas.
Además, un trabajo realizado en 2010 concluye que el yoga puede ser tan efectivo o mejor que el ejercicio convencional para mejorar resultados relacionados con la salud.
Estas son las asanas más comunes de ayayoga, ideales para principiantes:
- El saludo: se realiza de pie y con las piernas juntas. El torso debe estar inclinado hacia adelante en forma leve. El ejercicio consiste en extender los brazos por detrás de la espalda. Las manos deben quedar estiradas para lograr una abertura de pecho. Las palmas de las manos se giran hacia afuera para juntar los omóplatos. Los dedos deben estar abiertos, tan separados como nos sea posible. La mirada debe estar siempre al frente.
- La postura del guerrero: es una de las asanas clásicas del yoga convencional que ayuda a fortalecer piernas y tobillos, además de estirar pecho, hombros y abdominales. La diferencia para aplicarla en el ayayoga radica en la colocación de las manos con las palmas hacia arriba. Debemos posicionarnos de pie y estirar una pierna hacia atrás. Luego levantamos los brazos y entrelazamos las manos. Colocamos las palmas hacia arriba y nos estiramos todo lo que podamos para generar tensión en el torso. Tras completar el tiempo estipulado se cambia de pierna y se repite el ejercicio.
- Sentadilla con los brazos estirados: son ideales para fortalecer el tren inferior y el superior. Comenzamos de pie, con las piernas separadas en forma leve. Luego levantamos los brazos de manera que queden alineados con los hombros, con las manos entrelazadas. Después debemos girar las palmas hacia afuera. Ahora sí, debes flexionar las piernas y llevar la cadera hacia atrás para realizar la sentadilla, al tiempo que los brazos quedan estirados hacia adelante. Se repite la actividad hasta completar la serie.
Respiración, relajación y estiramientos
Después del entrenamiento es muy importante estirar los músculos para relajarlos, incluso en el yoga. Al realizar los ejercicios de elongación se reduce la tensión muscular, mejora la circulación y se ayuda a evitar lesiones.
Estas son algunas técnicas que puedes aplicar después de tus sesiones de ayayoga:
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- Respiración y relajación: elevar los brazos y juntarlos por encima de la cabeza con el cuerpo bien estirado. Una vez en esa posición, respirar profundamente. Otro ejercicio consiste en abrir las piernas a la altura del ancho de los hombros e inclinar el cuerpo hacia adelante de manera suave y con los brazos flojos.
- Estiramiento: para estirar la zona de los omóplatos puedes entrelazar las manos por encima de la cabeza. Las palmas se deben girar hacia el suelo y mantener los codos abiertos. Otra opción con la misma posición es inclinar el tronco hacia un lado y girar un codo hacia adelante. Luego movemos el torso hacia el otro lado y giramos el otro codo.
¿Cuáles son los beneficios que brinda el ayayoga?
El ayayoga nos ayuda a fortalecer la espalda, al tiempo que moldea nuestra figura. Por lo general, pasamos buena parte del día con posturas que pueden ser perjudiciales, como estar varias horas sentados.
Por eso es importante mantener fuerte la zona media o core. Y la espalda es clave para la estabilidad.
De acuerdo con un estudio sobre el manejo del dolor lumbar, el yoga es una de las intervenciones de ejercicios para la mente y el cuerpo que aborda los aspectos físicos y mentales del dolor con fortalecimiento central, flexibilidad y relajación.
Estos son otros beneficios importantes de la práctica del ayayoga:
- Mejora la postura.
- Adelgaza la cintura.
- Tonifica el tren inferior.
- Mejora la calidad del sueño.
- Relaja la tensión de los hombros.
La espalda es una parte fundamental del cuerpo para estabilizar la zona media, lograr una mejor postura y afrontar de buena manera todo tipo de actividades. Además, se trata de una zona en la que solemos padecer molestias y dolores.
El ayayoga surge como una buena oportunidad para fortalecer la región lumbar de forma sana y divertida. Además, es una práctica que nos ocupa poco tiempo del día y que podemos realizar en casa.
También ayuda a despejar la mente y a estilizar tu figura. Anímate a probar este método y disfruta del yoga, el ballet y todos sus beneficios.
Con información de Mejor con Salud