Advierten sobre la grave escasez de fármacos para aliviar el sufrimiento
Redacción 800 Noticias
A través de una carta pública, la Sociedad Venezolana de Medicina Paliativa (Sovemepal) alertó sobre la grave escasez de fármacos en Venezuela que atenúen el dolor de cientos de pacientes con enfermedades crónicas.
Los pacientes con enfermedades crónicas, avanzadas y progresivas durante el largo transcurrir de sus enfermedades presentan múltiples síntomas productores de deterioro de la calidad de vida, tal vez el síntoma más angustiante y que provoca más sufrimiento es el dolor. El dolor puede estar presente en cualquier enfermedad y a cualquier edad, constituye un problema básico de salud en todo el mundo. Con frecuencia no recibe tratamiento adecuado, por razones culturales, religiosas, de la sociedad y los profesionales sanitarios, así como por motivos políticos y económicos. Desde el punto de vista ético, aliviar el dolor es derecho del ser humano y obligación de los profesionales sanitarios. Su responsabilidad en lo que respecta a proporcionar un control adecuado del dolor está recogida en el Juramento Hipocrático y en la Declaración de Ginebra, que exige ante todo velar por la salud del paciente.
En 1961 la comunidad mundial (incluyendo Venezuela) adoptó un acuerdo internacional: la Convención sobre estupefacientes de 1961, que proclamó esosfármacos como indispensables para mitigar el dolor y ordenó a los países adoptar las medidas necesarias para asegurar su disponibilidad con fines médicos. Actualmente, Venezuela está atravesando una situación económica, política y social que atenta directamente sobre la salud pública y muy crítica en cuanto a la falta de analgésicos en general, especialmente analgésicos opioides, utilizados para dolor agudo y crónico, entre ellos el dolor por cáncer.
Desde octubre 2016, la Sociedad Venezolana de Medicina Paliativa (Sovemepal), representada por su Directiva, nombrada legalmente en asamblea, realizó un llamado en forma de Carta Pública, advirtiendo a las autoridades, sociedades científicas y público en general el grave problema de desabastecimiento a nivel nacional y sus consecuencias, si rápidamente no se tomaban previsiones.
Hoy en Venezuela no hay ninguna clase de medicamento analgésico, incluyendo opioides, que pueda aliviar dolor moderado a severo, no hay forma de aliviar el sufrimiento de tantos pacientes que luchan por la vida o están cercanos a la muerte. Como sociedad médica, como profesionales de la medicina, como proveedores de salud; tenemos el deber y la responsabilidad de hacer un llamado enérgico ante esta grave situación.