Una arritmia del corazón eleva riesgo de sufrir accidente cerebrovascular
EFE
Padecer fibrilación auricular, un tipo de arritmia del corazón, eleva hasta cinco veces el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular e incrementa las probabilidades de desarrollar insuficiencia cardiaca, dijo hoy a Efe un especialista.
«El gran problema de esta enfermedad es que puede pasar desapercibida y las personas que viven mucho tiempo con ella pueden tener como primer síntoma un accidente cerebrovascular», aseveró el cardiólogo Gerardo Rodríguez Diez.
La fibrilación auricular ocurre cuando el corazón se contrae de manera irregular, lo que lleva a que lata hasta seis veces más rápido de lo normal y entonces la sangre no es bombeada correctamente.
Debido a ello, el torrente sanguíneo puede ser más lento o estancarse y causar la formación de un coágulo el cual puede migrar a cualquier órgano del cuerpo, principalmente al cerebro.
De acuerdo con estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), este padecimiento afecta a poco más de 33,5 millones de personas en todo el mundo; mientras que en México alrededor de 1,3 millones de habitantes la sufren.
Explicó que entre los principales factores de riesgo están padecer una enfermedad cardiovascular como hipertensión, diabetes, cardiopatía isquémica, además de la obesidad, el sobrepeso, el tabaquismo y sufrir de apnea del sueño.
Pero también realizar ejercicio en exceso, practicar deporte de alto rendimiento por mucho tiempo, correr maratones, practicar alguna actividad de alto impacto, tener talla alta o familiares con esta enfermedad son factores de riesgo.
El problema, prosiguió, es que es una enfermedad degenerativa que, en la mayoría de las ocasiones se presenta en edades avanzadas debido al envejecimiento natural, aunque también puede darse desde los 35 años.
«Es una enfermedad compleja, es degenerativa y multifactorial y, si vivimos lo suficiente, podemos tener un evento de fibrilación auricular a lo largo de nuestra vida», argumentó el cardiólogo adscrito al área de arritmias del Centro Médico Nacional 20 de noviembre.
Rodríguez Diez, quien es electrofisiólogo, señaló que esto se ha convertido en un problema de salud pública pues muchas veces no provoca síntomas y por ello pasa inadvertida.
«El principal o primer síntoma puede ser el evento embólico cerebral. Si a alguien le da una embolia cerebral, el primer evento es incapacitante en 70 % de los casos y mortal en 20 %», comentó.
Si no se da tratamiento adecuado, dijo, se puede producir insuficiencia cardiaca y aumenta la mortalidad, por lo que es indispensable detectar y tratar oportunamente el padecimiento.
Explicó que, aunque la primera línea de tratamiento son los medicamentos antiarrítmicos que disminuyen fibrilación auricular, a veces estos ya no resultan suficientes por lo que hay que hacer un tratamiento más intenso e invasivo.
Se trata de la crioablación, un procedimiento en el que mediante un balón se congela el tejido en las cámaras superiores del corazón para bloquear la conducción de señales eléctricas irregulares que desencadenan la fibrilación auricular.
Con esto, señaló, se logra mantener al corazón en un ritmo normal la mayor parte del tiempo y el objetivo fundamental es tratar de mantener ese ritmo permanentemente.
«Este tratamiento es el más efectivo a mediano y largo plazo y se recomienda desde etapas tempranas ya que así se puede mantener más tiempo al paciente con una aurícula de tamaño normal», refirió el especialista.
Explicó que la recomendación es que las personas se hagan un chequeo con electrocardiograma después de los 40 años por lo menos cada dos o tres años y aprender a detectar los síntomas.
«Se pueden presentar palpitaciones, desmayos, mareos, sudoración y dolor en el pecho, debilidad, dificultad para respirar, ansiedad y angina de pecho», recalcó.
Además, señaló, se deben adoptar estilos de vida saludables, no fumar o dejar de hacerlo y acudir al médico de manera inmediata si se presenta algún síntoma.