+VIDEO| Trump insiste en que las elecciones a la Casa Blanca están amañadas
EFE
El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, insistió este lunes en que los comicios del 8 de noviembre en los que se enfrentará a la demócrata Hillary Clinton están amañados «en las urnas» en favor de la ex primera dama.
El magnate inmobiliario viajó hoy a Wisconsin, estado en el que tiene pocas posibilidades de salir victorioso -los demócratas ganan ahí desde 1988- pero muy simbólico por el enfrentamiento que mantiene con el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Paul Ryan, oriundo de esa tierra.
Hoy, Trump reunió a miles de personas en Green Bay (Wisconsin) al grito de «Paul Ryan apesta» y centró su discurso en un presunto amaño electoral en el que insiste desde hace semanas sin presentar pruebas y del que el aparato republicano se ha desmarcado.
Trump afirmó que cerca de 1,8 millones de personas fallecidas están registradas para votar en las elecciones presidenciales.
«Si van a votar por mi podemos hablarlo, pero tengo el presentimiento de que no van a votar por mi», bromeó el magnate, al añadir que todos estos muertos van a votar «por algún otro» candidato, en alusión a Clinton.
Trump también aseguró que 2,75 millones de personas están inscritas para votar en más de un estado y que un 14 % de los inmigrantes indocumentados también lo está, lo que equivale a un millón y medio de personas aproximadamente.
«Hemos descubierto que esta participación fue suficientemente grande para decantar la victoria demócrata en varias contiendas ajustadas», dijo Trump, al insinuar que el presidente de EE.UU., Barack Obama, ganó las elecciones de 2008 en Carolina del Norte, una contienda que se resolvió por poco más de 14.000 papeletas, gracias a los votos de los indocumentados.
Sin citarlo, Trump se refirió a continuación a Ryan y al resto de dirigentes republicanos que lo han censurado por insinuar que las elecciones pueden estar amañadas.
«¿Habéis oído a toda esta gente diciendo que no está pasando nada? Gente muerta desde hace más de 10 años que todavía votan, inmigrantes indocumentados que votan. ¿Dónde está la sabiduría de todos estos políticos? ¡No tienen!», dijo.
El fin de semana, Ryan había desautorizado al magnate: «Nuestra democracia se fundamenta en la confianza en los resultados electorales, y el presidente de la Cámara tiene total confianza en que los estados llevarán a cabo este proceso electoral con integridad», afirmó en un comunicado.
Antes del acto en Wisconsin, Trump ya había respondido a Ryan por Twitter: «Por supuesto que hay ya un fraude electoral a gran escala antes del día de las elecciones. ¿Por qué los líderes republicanos niegan lo que está ocurriendo? ¡Es tan ingenuo!».
«Paul Ryan, un hombre que no sabe cómo ganar -incluido que hace cuatro años se presentó como vicepresidente y perdió-, debe empezar a enfocarse en el presupuesto, las Fuerzas Armadas, los veteranos etc.», añadió.
Trump ha vuelto así a la guerra abierta contra una cúpula republicana que no le devuelve los golpes, guarda silencio y se concentra en hacer campaña en los estados para no perder el control del Senado en las elecciones de noviembre.
La hostilidad entre Ryan y Trump va en aumento desde que el congresista rompió la delicada tregua que mantenía con el magnate y anunció la semana pasada que ya no haría campaña para él, sino que se concentrará en mantener las mayorías republicanas en las cámaras legislativas.
Ryan, además, retiró entonces la invitación que le había hecho a Trump para participar en uno de sus actos de campaña para reelegirse como congresista.
Aunque Ryan ha sido el foco de la ira de Trump, su propio candidato a vicepresidente, Mike Pence, dijo este domingo que tanto él como el magnate «aceptarán el resultado de las elecciones y la voluntad del pueblo estadounidense».
Mientras Trump sigue con la campaña, con dos actos previstos este martes en Colorado, su rival, la demócrata Hillary Clinton, está concentrada en el tercer y último debate presidencial, previsto para el miércoles en Las Vegas (Nevada).