Sinéad O’Connor: «Lo que más me gusta de mi madre es que está muerta»
Agencias
Hace tan solo unas semanas, la cantante irlandesa Sinéad O’Connor compartía un vídeo a través de su perfil de Facebook que suponía un grito desesperado. «Ahora estoy viviendo en un motel Travelodge en Nueva Jersey, estoy sola y no hay absolutamente nadie en mi vida excepto mi médico, mi psiquiatra que es el hombre más dulce de la Tierra que dice que yo soy su heroína. Esto es lo único que me mantiene con vida en este momento, el hecho de que yo sea como un héroe para él, y eso es patético», se podía oír en la grabación. Un vídeo que preocupó enormemente a sus seguidores, pese a que no era la primera vez que sucedía algo similar, ya que en 2015 anunció su intento de suicidio a través de la misma red social.
Ahora, la artista que conquistó el mundo en 1990 con «Nothing Compares to You» ha concedido su primera entrevista, aún no emitida, en televisión al programa «El show del Dr. Phil». En el avance que ya se encuentra publicado en Youtube se puede ver una imagen desoladora de la artista. «No me mantengo con vida por mí. Si fuera por mí ya me habría ido, directamente con mi madre que está muerta», dice.
Pero estas no son las únicas declaraciones impactantes que hace en la entrevista en televisión: «Lo que más me gusta de mi madre es que está muerta». O’Connor fue víctima de abusos físicos y sexuales por parte de su progenitora.
También ha tenido palabras duras para ella misma. La artista que fue diagnosticada con un trastorno bipolar, en parte por los mensajes suicidas que ha publicado en sus redes sociales y sus ocho intentos de quitarse la vida, está cansada de que la tachen de enferma. «Estoy harta de que me definan como una loca, como una niña superviviente al abuso», explica.
La cantante ha sido noticia en numerosas ocasiones por sus continuos problemas mentales. Se vio obligada a cancelar su gira en el verano de 2015, debido al «agotamiento producido por una situación médica no resuelta». En noviembre de ese mismo año cortó los lazos con su familia tras conocerse la noticia de que había sufrido una sobredosis de pastillas en un hotel en Dublín. En mayo de 2016, después de no regresar a casa tras un paseo en bicicleta se declaró como persona desaparecida y a los pocos días fue encontrada en un hotel de Chicago por la Policía.