Shiffrin Vlhova título Copa del Mundo de esquí - 800Noticias
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800 Noticias | EFE

La estadounidense Mikaela Shiffrin, que apunta a una cuarta victoria final, y la eslovaca Petra Vlhova, que desea revalidar el título logrado la pasada temporada, se jugarán la Copa del Mundo de esquí alpino a partir de este miércoles en las finales de la competición, que tendrán lugar hasta el domingo en las estaciones francesas de Courchevel y Meribel; y que coronarán por primera vez al suizo Marco Odermatt.

Shiffrin, que a los 26 años hace ya varios que lo ha ganado todo en el deporte rey invernal -y que en los pasados Juegos de Pekín, el mes pasado, fue noticia por no ganar trofeo en ninguna de las seis pruebas que disputó- lidera la competición de la regularidad con 1.245 puntos, 56 más que Vlhova -de idéntica edad-, que el año pasado se convirtió en la primera eslovaca en ganar la gran Bola de Cristal y que en China capturó, al ganar el eslalon, el único título que le faltaba: el olímpico.

Odermatt, de 24, que el año pasado acabó segundo en la general, ya se puede considerar ganador, porque comanda con 1.379 puntos, 329 más que el noruego Aleksander Aamodt Kilde -vencedor hace dos temporadas-, que anunció que no disputaría el eslalon.

Aún en el poco probable caso de que Kilde incumpliese su palabra y sí compitiese el domingo en Meribel -sede de las pruebas técnicas y de la competición por equipos-, parece menos probable aún que el nórdico gane descenso, supergigante y gigante; y que el Odermatt, que sobre el papel tampoco disputará el eslalon y que también podría reconsiderar ‘in extremis’ esta decisión, no puntué en ninguna de estas tres pruebas: precisamente en las disciplinas en las que cuenta todos sus podios.

Kilde, de 29, que ya tiene asegurada la Bola de Cristal de supergigante, aspira a ganar también la de descenso -que al igual que la anterior, se disputará en Courchevel-, a la que apuntará este miécoles con 23 puntos de ventaja sobre el suizo Beat Feuz, ganador de las pasadas cuatro. Posibilidades de ganar esa Copa, aunque remotas, también tienen el austriaco Matthias Mayer y el italiano Dominik Paris.

Odermatt, primer suizo que gana la Copa del Mundo desde que lo hiciese por última vez hace 12 años Carlo Janka -retirado en enero, después de disputar ante su afición el descenso de Wengen-, y que ganó el oro olímpico en su principal especialidad, también tiene asegurada ya la Bola de Cristal de gigante.

Vlhova dejó matemáticamente cerrada a su favor en diciembre la clasificación final de eslalon; y Federica Brignone -que hace dos campañas se convirtió en la única italiana en ganar el gran Globo de Cristal- certificó su triunfo en la de supergigante.

En las finales queda en juego, aparte de la general femenina y el descenso masculino, el eslalon de hombres, que comanda el noruego Henrik Kristoffersen con 48 puntos sobre su compatriota Lucas Braathen y con 64 respecto al alemán Linus Strasser. El austriaco Manuel Feller y el suizo Daniel Yule, más distanciados, aún esperan una sorpresa, en la disciplina más movida de todas. En cuya final, el domingo y en Meribel, participará un español: el barcelonés Quim Salarich.

Relegado durante la pretemporada por los responsables de su federación al equipo B nacional, el catalán -que a los 28 años fue olímpico por segunda vez en Pekín- se convirtió este curso en todo un ejemplo de resiliencia. Confirmando el excelente trabajo efectuado junto al técnico italiano Corrado Momo, Salarich ha logrado los mejores resultados de un varón español en la Copa del Mundo en los últimos 42 años; desde la época en la que esquiaba Paco Fernández Ochoa, único campeón olímpico invernal de toda la historia de España: de eslalon, en los Juegos de Sapporo’72, en Japón.

El barcelonés, que en diciembre repitió en Madonna di Campiglio (Italia) el decimoquinto puesto logrado en Val d’Isere (Francia), rizó el rizo el último fin de semana de febrero en Garmisch (Alemania), donde fue octavo y séptimo -un puesto que no lograba un español (el citado ‘Paquito’) desde 1979-; antes de certificar su clasificación para las finales, al acabar vigésimo cuarto en Flachau (Austria).

La Copa de descenso femenino se decidirá este miércoles entre las dos últimas campeonas olímpicas de la disciplina: la italiana Sofia Goggia -oro en los Juegos de PyeongChang (Corea del Sur), hace cuatro años- y la suiza Corinne Suter, que en Pekín relegó al segundo puesto a la de Bérgamo, que defiende 75 puntos en Courchevel.

También se decidirá, el domingo, en Francia la Copa del Mundo de gigante femenino. La sueca Sara Hector -campeona olímpica de la disciplina- lidera con cinco puntos de ventaja sobre la francesa Tessa Worley y con 51 respecto a Shiffrin. Vlhova, a 91 puntos de la nórdica, también tiene, aunque muy lejanas, posibilidades de ganar este trofeo.

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