Segunda parte: Canelo vs. Golovkin

Agencias

Se acabó la espera. Pasaron 364 días. Tenía que ser el 5 de mayo pero un fallo en un control antidopaje realizado en marzo bajó ring al mexicano Saúl Álvarez (49-2-1, 34 por nocaut) por seis meses. Pasó medio año y la ‘T-Mobile Arena’, por fin, se vestirá de gala, para acoger la revancha entre el Canelo y el multicampeón kazajo Gennady ‘GGG’ Golovkin (37-1-0, 33 nocaut), después de la medianoche del domingo.

Denominada la pelea del año, la segunda parte de la Canelo-GGG estaba pautada para el 5 de mayo, pero fue pospuesta para la medianoche de este domingo. El año pasado, exactamente el 16 de septiembre, los púgiles terminaron su primera pelea en un controvertido empate por decisión de los jueces.

El azteca enfrentó en marzo uno de los capítulos más complicados de su carrera, cuando dio positivo por clembuterol, una sustancia prohibida que es común en los cortes de carne de res en México y que le ocasionó una sanción por seis meses.

Golovkin solo quería combatir con el oriundo de Guadalajara. La sanción fue menor a un año y el europeo estuvo dispuesto a reagendar el mano a mano, digno de una revancha entre superhéroes de la talla de Batman y Superman, enfrentados recientemente en una película producida por Warner Bros y dirigida por Zack Snyder.

Entre el mexicano y Golovkin solo ha habido un intercambio de insultos y amenazas que se convertirán en golpes cuando suban al cuadrilátero.

“Estoy molesto con el equipo de Canelo. Las excusas que dieron (por el dopaje), su actitud y la reacción de Canelo demostraron que no tienen respeto por el deporte o los fanáticos. Ellos son falsos”, declaró el kazajo en un entrenamiento previo a la pelea.
Canelo dijo en su momento que el positivo en el control antidoping fue por consumir carne contaminada.
“Canelo está haciendo trampas. Están usando esas drogas y todos pretenden como que no está pasando. ¿Y seguís preguntando sobre la carne? No tiene nada que ver con la carne. Era obvio cuando sus músculos eran tan visibles, con marcas de inyecciones”, apuntó ‘GGG’.

Álvarez llamó “pendejo” al entrenador de ‘GGG’, el mexicano Abel Sánchez. Días después, señaló a Golovkin como un hipócrita. Sánchez acusó a Álvarez de correr durante el primer combate entre ambos.
“Los comentarios de (Abel) Sánchez no me molestan porque él piensa que es un gran entrenador, pero en realidad no sabe lo que es el boxeo. No sabe lo que es tener técnica. No sabe lo que es boxear ni moverse. No sabe lo que es adaptarse a las circunstancias de una pelea en vez de simplemente salir ahí y lanzar golpes (…) Es un ‘pendejo”, expresó Canelo.

Álvarez criticó a Golovkin porque el kazajo dijo que su estilo es más mexicano que el de Canelo: “Ha habido muchos peleadores de México que tienen estilos diferentes. Mi estilo es el mío, soy mexicano. No sabe lo que me queda por mostrar”.

Golovkin, favorito en las apuestas, prometió castigar al mexicano.
“Quiero castigarlo por todas las cosas malas que él y su equipo han hecho. Canelo no es un campeón. Es un mentiroso que no tiene respeto por el deporte del boxeo o sus fanáticos (…) Perdí todo respeto por él. Quiero seguir siendo campeón del mundo y llevar todos mis cinturones a casa. Estoy listo para protagonizar otro Big Drama Show. En la última pelea no sentí ningún poder real por parte de Canelo, solo bofetadas. Él no es el pegador más duro que he enfrentado”.

Poco más de 20 mil personas asistirán a la ‘T-Mobile Arena’ de Las Vegas, donde el kazajo será favorito según las apuestas en un combate que debería empezar pasada la medianoche del domingo. De acuerdo con MGM, Golovkin mantiene una probabilidad de -155, respecto a los momios que dictan que Canelo está +125. Un nocaut de Canelo sobre ‘GGG’ paga 8/1, mientras que de Saúl Álvarez de los rounds del 5 al 11 paga 75/1.

Es probable que Canelo, como Batman, aplique el método de combate keysi, para usar sus instintos y los principios básicos de boxeo para saber cómo atacar al potente Golovkin, reconocido mundialmente por su pegada. Triple G, como Superman, puede ser “más rápido que una bala, más poderoso que una locomotora, capaz de saltar altos edificios de un solo salto”, pero, si el kazajo baja la guardia y olvida mantener la postura, el azteca podría representar su kriptonita.