Nuevo cardenal de Nicaragua promete servir con sencillez a la Iglesia
MANAGUA, (AFP) – El arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, recibió este domingo con emoción y «sorpresa» la decisión del papa Francisco de nombrarlo cardenal junto a otros 18 purpurados, un reto que, dijo, lo compromete a continuar sirviendo con sencillez a la iglesia desde Nicaragua, donde el catolicismo tiene una fuerte influencia.
«Acepto este reto como una forma de confianza del Santo Padre para que sea uno de sus colaboradores más cercanos dentro del colegio cardenalicio», afirmó Brenes a la prensa, tras presidir la homilía dominical en la Catedral de Managua.
Con el papa Francisco «nos une cierta amistad y trabajo en la misión» de evangelización, subrayó Brenes, quien aseguró, sin embargo, que su designación lo tomó por «sorpresa» y que hasta le dio «ganas de llorar» de la emoción.
La noticia «me ha sorprendido porque pienso que habrá otros arzobispos de más prestigio que este servidor, pero las cosas de Dios son así, él se ha fijado en este humilde servidor, y pues quiero seguir siendo el pastor que ustedes conocen», cercano a su parroquia, indicó.
«Quiero mantener siempre mi origen sencillo. Mi madre es una costurera, mi padre es un campesino», agregó.
Brenes, de 64 años, ejerce el sacerdocio desde hace cuatro décadas y ha tratado de mantenerse al margen de la política doméstica.
Su nombramiento fue celebrado por el presidente Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo, quienes, dijo, lo llamaron por teléfono para felicitarlo, así como por los partidos de oposición, los obispos nicaragüenses y centroamericanos.
«Es una bendición para todo el pueblo católico poder contar con un nuevo cardenal con la calidad humana» de Brenes, elogió el líder de la oposición liberal, Eduardo Montealegre, mientras que la disidencia sandinista calificó en un comunicado su nombramiento como un reconocimiento a la «misión profética» de la Iglesia en favor de «la democracia».
Los obispos, por su lado, elevaron sus oraciones para que Brenes «siempre se vea asistido por la luz y la fuerza del Espíritu Santo» en su nueva misión, declararon en un comunicado.
Brenes fue nombrado en 2005 arzobispo de Managua por el fallecido Juan Pablo II, en sustitución del entonces arzobispo, el cardenal nicaragüense Miguel Obando, quien pasó a retiro.
Brenes se manifestó a favor del proceso de trasformación que impulsa el papa Francisco en la iglesia.
Brenes es el segundo cardenal que tiene Nicaragua después de Miguel Obando, el último que fue nombrado en el cargo en 1985, durante la Revolución Sandinista y en medio de una guerra civil con grupos contrarrevolucionarios.