Campeón en campo minado
En la batalla gana el más fuerte. En las guerras los débiles se apartan y ayer Cocodrilos de Caracas no se arrinconó ante su enemigo. Contra las condiciones más difíciles, frente a inadaptados que lanzaban botellas de vidrio desde las gradas, el conjunto de Néstor Salazar consiguió su quinto título de la LPB, después de vencer en Puerto La Cruz a Marinos de Anzoátegui 63 por 61 en el séptimo juego de la final.
Es que el entorno fue tan complicado que el juego no pudo completar sus 40 minutos. Marinos estaba abajo 63 por 61 y el árbitro estadounidense Derek Richardson señaló que la bola pasaba a Cocodrilos por un fuera de banda.
Henry Paruta, el técnico del Acorazado, se le encimó al juez y este no dudó en sancionar una falta técnica que causó el apocalipsis en el gimnasio. El conjunto capitalino ni pudo gritar su título en la cancha. Tuvieron que correr, esquivar los objetos que caían desde las gradas, y encerrarse en el camerino visitante para celebrar un título en la intimidad.
El comisionado colocó el reloj de los 15 minutos para esperar una reanudación que fue imposible por las situaciones de violencia. El tabloncillo estaba repleto de vidrios. Era imposible jugar.
“Esto no es Caracas ni nunca lo será”, gritó Luis Bethelmy antes de abrazar a su técnico Néstor Salazar y bromear sobre los cánticos de la afición oriental. “Somos campeones en Puerto La Cruz”.
Salazar ganó su tercer título como estratega y el segundo contra Marinos en los últimos cinco años. “La tuvimos difícil en muchas oportunidades. Pero jamás tuvimos pánico. Estuvimos firmes y creyendo en nosotros. Es una de las victorias más bonitas de mi carrera”.
A Carl Elliott todos sus compañeros lo buscaban en la celebración. El importado se había negado a ser entrevistado durante toda la final alegando estar concentrado. Sin embargo, estalló en júbilo y le respondió a los micrófonos.
“La defensa fue clave. No puedo explicar lo que siento. Es hermoso ganar un séptimo partido. Lamento lo de los fans de Marinos pero siempre los utilicé de motivación. Este es mi campeonato favorito en mi carrera”, gritó Elliott, antes de hacer el gesto de encender una motocicleta, característico en su compatriota Leon Rodgers, quien no pudo repetir la corona con Marinos.
Cocodrilos tuvo que esperar más de una hora para salir a recibir el trofeo. Aguardaron a que el escenario se los permitiera, pero igual alzaron el cetro entre insultos y objetos voladores.
Pero ni eso evitó que la fiesta continuara. El equipo siguió su batalla y levantaron el trofeo en la casa del rival.
Cocodrilos acabó con el mito de que un equipo en renovación no gana campeonatos. También cortaron la racha de dos campeonatos consecutivos del Acorazado. Hoy celebra Caracas, sufre Puerto La Cruz, y llora el baloncesto con la violencia.
Emmett, el valioso refuerzo
Andre Emmett estuvo cerca de firmar con Marinos antes de llegar a un acuerdo con Cocodrilos. La gerencia naval decidió desechar su opción y hoy el alero estadounidense celebra su premio al Jugador Más Valioso de la final.
“Es algo increíble este premio ante el segundo mejor equipo de Venezuela. Es una sensación muy bonita porque jugué con ellos. Pero este premio se lo dedico a Jesús Centeno. Él es el capitán. Él me calmó cuando lo necesité”, reconoció el jugador, que terminó con 26 tantos en el juego.
DEL TABLONCILLO
El propietario de Marinos, el grandeliga Carlos Silva, fue impactado con un objeto contundente en la cabeza. Sin embargo, el ex pelotero reaccionó de manera lamentable y golpeó a un fotógrafo que laboraba en el escenario…Esta fue la primera final que Oscar Torrespierde en su carrera en Venezuela. El caraqueño tiene 6 títulos, todos con Marinos…Bob Abreu, vicepresidente de la LPB, lamentó los episodios de violencia. “Tenemos que buscar una solución”, dijo el pelotero…De acuerdo con Sergio Silvio, presidente de la Comisión Técnica de la LPB, el primer juego de Marinos como local la campaña que viene se realizará a puerta cerrada…
Información El Nacional