Tokio revisa los costos y el impacto ambiental de los Juegos 2020
TOKIO, (AFP) – Tokio está sometiendo a un severo escrutinio sus infraestructuras para los Juegos Olímpicos de 2020 debido a los costos de construcción y el impacto ambiental, afirmó este miércoles el gobernador de la capital japonesa, Yoichi Masuzoe.
Se estima que la factura para la decena de nuevas instalaciones y la remodelación de las dos existentes será, por ahora, el doble de los 1.500 millones de dólares iniciales.
La pieza clave de los Juegos, el nuevo estadio, también ha sido criticado por su precio y el temor de que su diseño futurista dañe visualmente el paisaje de uno de los pocos cinturones verdes de la ciudad.
Masuzoe aseguró que los funcionarios de la metrópolis volverían a revisar las construcciones planeadas para ayudar a los ciudadanos de Tokio a «entender mejor» los planos.
«Necesitamos examinar de manera realista qué tipo de legado dejará lo que está diseñado, una vez acaben los Juegos», afirmó a la asamblea municipal el martes y que después publicó en su página web.
«Tenemos que tener en cuenta las preocupaciones sobre el costo que supone preparar los Juegos, al igual que el precio ascendente de los materiales y los gastos laborales», prosiguió el político.
«Los Juegos Olímpicos y Paraolímpicos no solo son el acontecimiento deportivo más importante del mundo sino que también son eventos que traen consigo grandes oportunidades para la gente y la cultura de la ciudad anfitriona», añadió Masuzoe.
El mercado laboral de Tokio se está estrechando con la reducción de la oferta de trabajadores especializados, lo que aumenta sus salarios, mientras que el cada vez más débil yen encarece la importación de materiales de construcción.
Entre las preocupaciones medioambientales destaca el canal en el que se disputará el eslalon en canoa, que los ecologistas aseguran podría poner en peligro la vida salvaje de la zona que incluye especies amenazadas.
El Comité Organizador de Tokio aseguró que celebrará una «reunión de ajustes» el jueves con los principales políticos municipales y el jefe del Comité Olímpico Japonés, Tsunekazu Takeda.
Masuzoe no fue claro sobre si el nuevo estadio Olímpico, que estará subvencionado por el gobierno nacional, entraría dentro de la revisión, pero aseguró que «seguirían estudiando» su impacto en los parques locales y carreteras.
Un grupo de importantes arquitectos y grupos de la sociedad civil han criticado el diseño del estadio y su costo, que se valoró en 3.000 millones de dólares antes de que los organizadores redujeran el tamaño del edificio.
El gobierno nacional está convencido de que el emblemático estadio costará 1.600 millones de dólares pero los críticos se han mofado de la reducción en el costo y afirman que seguramente superará lo presupuestado.