Ogier y Latvala llevan su pulso al Rally de Cerdeña en el Campeonato Mundial de Rally
CAGLIARI, (AFP) – El Campeonato del Mundo de Rally (WRC) vuelve desde este jueves en Cerdeña, sexta prueba de la temporada, con un previsible nuevo duelo sobre la exigente tierra sarda entre los dos primeros espadas de Volkswagen Motorsport, el francés Sebastien Ogier y el finlandés Jari-Matti Latvala.
El galo, vigente campeón del mundo, y su compañero se han repartido las cinco primeras carreras del campeonato y solo han dejado las migas (seis puestos de podio en total) a los pilotos de Citroën, Ford y Hyundai.
Ogier manda sobre Latvala 3-2 en victorias y 112-88 en puntos en el campeonato de pilotos. Detrás, hay un vacío, ya que los noruegos Andreas Mikkelsen (VW) y Mads Ostberg (Citroën) solo suman 48 puntos. En cuanto a la clasificación de constructores, la marca alemana ya suma el doble de puntos que Citroën (187-90).
La ventaja es muy clara y la escudería alemana no ha previsto dar órdenes de equipo este fin de semana en Cerdeña, como el mes pasado en Argentina donde el duelo entre sus dos pilotos tuvo en vilo a los aficionados a los rallies hasta el domingo al mediodía.
En la isla italiana, se correrán 17 especiales y 365 kilómetros cronometrados para escribir un capítulo más en la pelea entre los dos gallos del WRC.
Tras una especial inicial corta (1,3 km), sin más interés deportivo, prevista para este jueves por la noche en Cagliari, la carrera de verdad empezará el viernes con ocho especiales en las que el menor error de conducción, bajo un sol de justicia, se castigará con un neumático pinchado, en el mejor de los casos, una rueda perdida o una suspensión destruida.
El sábado, solo habrá cuatro especiales, pero con una pequeña novedad: la mítica especial de Monte Lerno, famosa por su espectacular salto, ha sido alargada y serán 60 km que se correrán dos veces y deberían marcar grandes diferencias en la general.
El domingo será más tranquilo con solamente 50 kilómetros de especiales y un ‘Power Stage’ con puntos bonus.
Ogier y Latvala ya han ganado una vez cada uno en las carreteras sardas: el francés el año pasado y el escandinavo en 2009, con un Ford. Tras la victoria en Argentina, el finlandés llega lleno de confianza.
«Hay algunos rallys en el calendario que espero con impaciencia y, este de Cerdeña, es uno de ellos», aseguró Latvala.
«El piso se parece al de Portugal, pero aquí se ven mejor las curvas. También es un poco más resbaladizo porque tiene más arena. Las especiales son estrechas, los árboles y las rocas están muy cerca de uno. No hay muchos sitios para derrapar, vamos a tener que ser prudentes, sin meternos mucha presión al principio», añadió el finlandés.
«Estoy impaciente por rodar en Cerdeña», confesó por su parte Ogier. «El trazado rápido sobre la tierra sarda se adapta mucho mejor a mi estilo de pilotaje. Nuestra primera posición del viernes no nos beneficiará, pero sigo pensando que tenemos muchas posibilidades de ganar. Puedo asegurar a todos que el apasionante duelo (con Latvala) va a estar al rojo vivo», avisó el campeón francés.
Como viene siendo habitual, los Citroën, los Hyundai y los Ford más rápidos estarán al acecho por si acaso tienen una oportunidad.
Sobre la tierra sarda selectiva, exigente, abrasiva y traicionera no se puede descartar una gran sorpresa.
