Magallanes a la final
Mario Lissón, Súper Mario, volvió a cargar con la ofensiva del Magallanes y lo capitaneó a su segunda final seguida. El slugger sacudió dos jonrones y remolcó cuatro carreras en el triunfo 8-0 contra los Leones del Caracas, que convirtió en una simple anécdota las especulaciones sobre un triple empate en el round robin. Los Navegantes no tendrán que sacar cuentas.
Luego de perder tres encuentros seguidos, la nave retomó el rumbo y ganó sus siguientes tres desafíos, incluido su primer blanqueo, para terminar en lo más alto de la semifinal con récord de 11-5 y así ganarse el derecho de comenzar mañana en el José Bernardo Pérez la gesta que podría llevarlos a revalidar el título alcanzado en la campaña anterior.
«El destino me puso nuevamente aquí para colaborar con el equipo que ha sido mi vida», destacó el manager Carlos García, mientras contenía el llanto. «Cuando atravesamos por momentos difíciles, nos reunimos como equipo y logramos superar la adversidad».
Lissón fue un hombre fundamental. Anoche sacó la bola en el primer inning, con Alberto Callaspo en primera, un estacazo que puso adelante 2-0 a los valencianos, y luego en el séptimo, de nuevo con Callaspo en circulación, para coronar un racimo de tres que abrió el marcador 6-0.
«Estoy muy contento, gracias a Dios salieron las cosas durante todo el año», señaló el caraqueño, que terminó con 10 cuadrangulares y dejó en el olvido el récord del Magallanes, en manos de Richard Hidalgo, con ocho, y el registro para una semifinal, establecido por Miguel Cabrera en la temporada 20042005.
«Respeto a Cabrera y a todos los peloteros que llegaron a estar cerca de ese récord», agregó Lissón, que ahora suma 26 vuelacercas en la zafra, entre ellos sus 16 en la ronda regular. La marca global pertenecía a Robert Pérez, con 24, desde la 2003-2004.
«Ha sido un jugador muy especial para el Magallanes», puntualizó el Almirante García.
Ese soporte ofensivo permitió al zurdo Dustin Richardson trabajar con comodidad desde el montículo.
«Cuando (Lissón) sacó el segundo jonrón fui a abrazarlo y le dije `tu eres Súper Mario’», sonrió Richardson, que aisló 3 hits en 6 entradas en las que consiguió 17 de 18 outs en el infield, 5 de ellos ponches por apenas un boleto.
«Fui agresivo con mi recta y los pitcheos secundarios funcionaron muy bien, en especial el slider», agregó.
Deolis Guerra, Fernando Abad y Jean Machí extendieron el dominio de Richardson durante el último tercio del juego y apenas permitieron que dos corredores de los Leones se embasaran.
Machí consiguió el último out ponchando a Bob Abreu, el hombre que había guiado las épicas remontadas del Caraca, con apenas cuatro envíos.
«Mario tuvo un gran round robin y nosotros hicimos nuestra parte. Aquí todos fuimos protagonistas», sentenció Guerra, mientras sus compañeros le daban una ducha de vino espumante.
«Este equipo sabe cómo jugar y nunca se rinde. Llevaremos esa virtud hasta la final», dijo el piloto García.
Magallanes intentará sumar dos títulos consecutivos por primera vez desde mediados de los noventa.
Información El Nacional
