Brasil celebra sorteo de grupos de Mundial-2014
COSTA DO SAUIPE (AFP) – La ceremonia del sorteo que definirá los grupos de la Copa Mundial Brasil-2014 comenzó este viernes a las 16H00 GMT en Costa do Sauipe (noreste de Brasil) con un homenaje al fallecido expresidente sudafricano Nelson Mandela.
Mandela, que murió el jueves a los 95 años en su domicilio en Johannesburgo, fue el arquitecto del Mundial de Sudáfrica-2010, según Blatter, su gran sueño hecho realidad.
«Ya verán lo que mostraremos hoy, él con (el trofeo de) la Copa del Mundo en sus manos, fue su momento más feliz, un sueño hecho realidad, cuando el mundo dio la Copa del Mundo a Sudáfrica», añadió.
La FIFA informó el jueves que como señal de duelo, las banderas de las 209 asociaciones miembro ondearán a media asta y habrá un minuto de silencio en los próximos partidos internacionales.
En «el límite»
El sorteo se celebra en medio de las preocupaciones por los atrasos que puede causar el fatal accidente en el estadio de Sao Paulo, que recién estaría listo, según datos preliminares divulgados por Blatter, a «mediados de abril», dos meses antes del torneo.
Pero «por ahora no hay plan B», aclaró.
El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, dijo en una entrevista con la AFP que la sede de Sao Paulo «queda en el límite» debido al retraso por el accidente que mató a dos obreros al colapsar una grúa que destrozó parte del recinto hace una semana.
Entre la fecha de entrega de los estadios y la Copa del Mundo que se inicia en junio, la FIFA exige la realización de al menos dos eventos de prueba para verificar que todo funciona correctamente.
En Brasilia, se celebró este viernes una pequeña manifestación para reclamar mejores servicios públicos y menos estadios. Otras manifestaciones han sido convocadas en Rio de Janeiro frente al estadio Maracaná, así como en Salvador de Bahia, a 70 km del aislado complejo hotelero de Sauipe, donde se celebra el sorteo.
El grupo de la muerte
Hay ansiedad entre las 32 selecciones mundialistas para conocer no sólo a sus rivales, sino también las distancias que recorrerán en este país de tamaño continental y los cambios de clima que enfrentarán en cada sede.
Valcke conducirá el sorteo con la colaboración de ocho figuras del fútbol, una de cada uno de los países campeones del mundo, entre ellas el francés Zinedine Zidane, el italiano Fabio Cannavaro y el uruguayo Alcides Ghiggia, verdugo de Brasil en el mundialmente conocido ‘Maracanazo’.
«Me gustaría mucho que hubiera una nueva final Brasil y Uruguay, quiero verlo como espectador, como hincha de Uruguay», dijo Ghiggia, de 86 años.
Las 32 selecciones se repartirán en ocho grupos de cuatro equipos cada uno, a través de un complejo mecanismo diseñado para mantener a equipos del mismo continente lo más lejos posible. Aunque habrá al menos dos equipos de Europa -que tiene 13 representantes- en algunas llaves.
La presencia de las ocho selecciones que han sido campeonas del mundo podría generar más de un ‘Grupo de la Muerte’.
Brasil, cabeza del grupo A, podría enfrentar en un eventual ‘Grupo de la muerte’ a Francia, su verdugo en el Mundial-1998, a Italia, Inglaterra, Holanda o Portugal.
En un ensayo de sorteo realizado el miércoles, por ejemplo, el Grupo A lo componían Brasil, Francia, Italia y Australia, un escenario probable que pone la piel de gallina.
Maratón
El sorteo determinará la suerte de los maratónicos viajes que enfrentarán las selecciones en este país de tamaño continental, donde un juego puede disputarse en un día de invierno austral en el sur de Brasil y al otro en el sofocante calor del noreste, a pleno sol, apenas pasado el mediodía.
Por ejemplo Brasil, que se concentrará en Teresópolis, en el estado de Rio (sudeste), viajará una hora de avión hasta el frío Sao Paulo para el juego inaugural, a 2.370 km de su próximo juego en Fortaleza (noreste), donde el calor es sofocante. Y cierra la fase de grupos en Brasilia (centro-oeste), a 1.700 km. Cada uno de estos dos últimos recorridos por tierra llevaría más de 24 horas cada uno.
Lo mismo para el que ocupe la posición B4, que viajará de la calurosa Cuiabá (centro-oeste) a la helada Porto Alegre (sur) en cinco días. Distancia: 1.681 km, que en auto tomaría unas 28 horas.
