San Juan Bautista de La Salle, por María García de Fleury
Por: María García de Fleury
El 7 de abril se celebra la fiesta de San Juan Bautista de La Salle. Es muy interesante saber que San Juan Bautista de la Salle nació el 30 de abril de 1651, en el mismo año en el que la virgen madre de Dios con el niño Jesús se le apareció por primera vez en Guanare, Venezuela, al cacique Coromoto y a su familia. Se apareció en el rio y les pidió que fueran donde los blancos, se echaran agua en la cabeza para poder ir al cielo.
Juan Bautista de la Salle fue un francés que fundó la congregación de los hermanos cristianos para la educación de niños y jóvenes, fue un gran reformador de la educación, instruyó a sus profesores, sobretodo en materia de religión, en la amabilidad y los consagró a todos a la santísima virgen, animándolos a ser fervorosos propagadores de la madre de Dios.
Es interesante saber también que fue uno de los hermanos de La Salle, el hermano Nectario María quien después de haber llegado al estado Lara, Venezuela en 1913 como uno de los fundadores del colegio La Salle de Barquisimeto, se interesó por el estudio de la presencia de la virgen en este país y se convirtió en el mayor investigador, estudioso y promotor de la devoción a la virgen de Coromoto.
¿Coincidencia?, no, Dios tiene un plan trazado muy especial que nosotros no conocemos y sin duda unió a los hermanos de La Salle con nuestra madre de Coromoto.
Juan Bautista de La Salle quiso desde joven ser sacerdote y estudió en el seminario de San Suplicio, en París. Al poco tiempo de ser ordenado sacerdote, murió su director espiritual y este le dejó encargado la obra que él había fundado, que era una obra de niños pobres, tenía una escuela para varones y un orfelinato para niñas pobres y este orfelinato estaba dirigido por las hermanitas del niño Jesús.
El padre La Salle asumió esta obra y entre sus reformas educativas inició el método de educar a los niños en grupo en lugar de individualmente, reemplazó el sistema de castigo y de terror en los alumnos por el método del amor y de la convicción. Enseñaba sobretodo conocimientos prácticos que más le iban a ser de utilidad en la vida diaria a los jóvenes, con base en la religión y en la amabilidad.
Muy pronto se empezaron a ver los resultados positivos de estos nuevos métodos de educación que el padre Juan Bautista aplicaba. Como necesitaba profesores, porque los alumnos aumentaban cada vez más, reunió a personas dispuestas para ser instruidas en el arte de educar, y además de todo,los formaba fervorosamente en la vida religiosa.
Con los más entusiastas formo la comunidad de los hermanos de las escuelas cristianas, todos muy apegados a la eucaristía y a la devoción a la virgen, buscaba que cada maestro se esforzara con toda su alma por tratar que los niños y los jóvenes conservaran su inocencia y en caso de haberla perdido, que la recuperaran, que renovaran su amistad con Dios, que crecieran en amor a Dios, que crecieran en amor al prójimo y vivieran alejados del pecado.
El padre La Salle regaló toda su fortuna y la aplicó para este proyecto educativo. Como sacerdote de profunda oración les insistía a sus religiosos que lo que con más éxito se consigue en la labor de un educador es orar, orar por sus alumnos, orar por sus compañeros, dar buen ejemplo y tratar a todos como Cristo enseñó, porque él estaba convencido de que con Dios ¡siempre ganamos!
