Sabías que no es el cloro lo que irrita tus ojos en la piscina…
Agencia.- …es algo mucho, mucho peor. Si alguna vez se te han irritado los ojos tras una sesión de piscina y le has echado la culpa al cloro, ten la decencia de pedirle perdón. Pues este material no es el principal causante de tus ojos rojos, es algo mucho peor.
El Doctor Michael Beach, director adjunto del programa de Agua Saludable de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades en Estados Unidos, dice que “dicho picor e irritación se debe a la unión del cloro, la orina y el sudor presentes en el agua. El nitrógeno de estas sustancias se mezclan con el cloro y forma lo que se conoce como cloramina.
La irritación de los ojos es desagradable, pero recordemos que el cloro tiene la función de mantener el agua libre de gérmenes, así que si no se lo añadieran, nadaríamos en una sopa de agua, sudor y orina, que es bastante peor.
También, el experto afirma que es falso el famoso círculo rojo o azul que surge cuando alguien se orina en la piscina: “eso es completamente falso. No importa lo que te hayan dicho, no es cierto. No hay ninguna sustancia química mágica que cuando se añade a una piscina revele la presencia de orina en el agua”.
Pero el señor Beach quita importancia a todo lo anterior. Afirma que, con una simple ducha tras el baño, tu cuerpo puede verse liberado de todos esos gérmenes y de esa suciedad que podría causarte alguna enfermedad. Y con una ducha previa, evitas meter en la piscina más suciedad de la que podría haber.
Así pues, si ves que en tus próximas vacaciones te pican mucho los ojos, huye de allí y utiliza la ducha para eliminar todos los agentes externos.