Robredo: «La rivalidad Federer-Nadal ha enseñado mucho como para empañarla»
EFE
A sus 37 años, Tommy Robredo (Hostalric, Gerona) lo tiene muy claro. Habla con la serenidad que proporciona la experiencia de estar en el circuito desde hace 21 años, un periodo en el que ha conseguido 12 títulos, entre ellos el Masters 1.000 de Hamburgo y el Conde de Godó, además de una Copa Davis.
De vuelta de casi todo, y después de superar muchas lesiones, el que fuera quinto mejor jugador del mundo en 2006 lucha ahora por volver al grupo de los cien primeros como uno de sus últimos grandes objetivos.
Y con ese ánimo habla con EFE durante la Senior Masters Cup que se disputa en el Hotel Puente Romano de Marbella, donde comenta sus ilusiones, motivaciones y donde explica que «la rivalidad Federer-Nadal ha enseñado mucho», como para ser empañada por otras circunstancias que rodean ahora a este deporte.
P. ¿Qué motiva a un jugador veterano como usted para seguir compitiendo?
R. El tema de veterano es muy relativo. Antes la gente se retiraba antes, pero ahora el cuerpo aguanta mucho más y no se suele decir hasta aquí, ya no puedo más. Lo que hago es porque me gusta y porque estoy con ganas, ilusionado porque quiero conseguir un último objetivo que puede ser el más complicado de mi carrera, intentar meterme entre los cien primeros después de todo lo vivido, una ilusión que tengo.
P. ¿Qué es lo más difícil para mantener esa motivación, después de tantas lesiones?.
R. Al final, si haces lo que te gusta es fácil. Pero cuando estás viajando por el mundo y pierdes y pierdes se hace complicado. Llegas a casa, estás triste y además solo. Este mundo es así, cuando estás arriba tienes mucha gente alrededor y cuando no…..no es lo mismo.
Ahora estoy a tope con mi equipo, rascando todo lo que pueda cada semana. Y cuando un día me retire podré evaluar lo que ha sido mi carrera y pensar en los objetivos que cumplí y disfrutar de lo conseguido, y pensar que lo que no logré también fue bonito intentarlo.
P. En toda su carrera, ¿a qué jugador ha admirado y por qué? y ¿a quién ha odiado?.
R. Admiro a todo el mundo que hace lo que le gusta y se desvive por ello. Cuando ves a gente en la pista y fuera de ella entrenándose a tope, y los ves que son profesionales como la copa de un pino, es digno de admirar. Hay otros mejores que no trabajan ni la mitad, y los admiro menos. En España hemos tenido muchos para admirar. Aquí tenemos (en Marbella) a David Ferrer, y luego a Rafa, a ‘Feli’ que han dado mucho por este país.
¿Odiar?, bueno había jugadores que enfrentarse contra ellos era algo odioso. Andy Roddick me gustaba mucho, pero me daba poco ritmo. Cuando juegas contra los ‘cracks’, Nadal, Federer, Djokovic es duro ganarles, pero no era odio, como jugar contra los Karlovic, Roddick que no me gustaba tanto.
P. ¿Qué es lo más injusto que tiene el tenis?
R. Nada. No creo que haya injusticias en el mundo del tenis. Es un deporte muy justo. Al final, entras en la pista y tienes que batir al rival y no dependes de lo que diga el árbitro. Tienes que ser mejor que tu oponente. Hay una puntuación anual, depende de como te vaya. No le veo nada injusto.
P. Copa Davis. Por el puesto de capitán han pasado jugadores como Moyá, Costa, Corretja, ¿siente que el tenis español le debe, en un día determinado a usted, el puesto de capitán?.
R. A mí no me debe nadie nada. Si me pongo a pensar, David Ferrer o Feliciano también podrían ser capitanes, o Verdasco, o Nadal y Ferrero. Hay tantísimos jugadores que se merecen esto. Si fuera como en Alemania que hay menos, los números son muy claros, pero siempre digo lo mismo. A día de hoy me quiero centrar en mi carrera deportiva, y sigo en activo, y quiero dar lo máximo.
El día que diga hasta aquí y me salga una oportunidad como esta, obviamente estaré encantado pero habrá que analizarla y ver las prioridades, porque el día que lo dejé esa prioridad puede ser la familia. Pero si me ofrecen un cargo así, capitán de Copa Davis o dirigir un centro espectacular o algún jugador muy bueno, como me gusta mucho este deporte será como un gusanillo.
P. ¿Se ve como entrenador en un futuro?, y si fuera así, qué preferiría entrenar, a un hombre o a una mujer?.
R. Siempre digo que cuando empiezas a pensar en lo que harás mañana no piensas en lo que haces hoy. Cuando uno tiene 18 años no piensas en nada, solo en tenis. Cuando tienes 22 piensas en tenis y en alguna otra cosa que «te molesta» y que te saca un ratito de tu tiempo.
Cuando tienes 27, eso aumenta y con 37 tienes muchas cosas abiertas que, quieras o no, en algún momento te descentran un poquito o hacen que no tengas esa capacidad de hacer al cien por cien lo que quieres hacer.
Me he ganado el derecho de que el día que diga basta, poder estar un año o dos años sin hacer nada. Por suerte, económicamente no tengo que depender del sueldo de final de mes de ese año. El día que me retire hablaré con mi familia, y decidiré.
P. ¿Quién de los dos, Nadal o Federer, terminará ganando más títulos del Grand Slam?.
R. Es complicado decirlo. A día de hoy, Nadal tiene un «número más» que Federer por el hecho de edad y nivel ahora mismo. Pero estamos hablando de deporte, y es algo muy complicado. ¿Y si Rafa se lesiona o no gana Roland Garros el año que viene?. ¿Y si Federer «la clava» en Australia, o Djokovic viene por detrás y les arrasa?. Pase lo que pase, gane uno 19, y el otro 21, 22 o 23 estamos hablando de números que son estratosféricos.
Pero fuera de esos números, ¿por qué se valoran solo los torneos del Grand Slam, y no se valora también una Copa Davis u otros torneos, como una Olimpiada?. Al final, si Rafa gana 21 Grand Slams, y Federer 20, habrá gente que dirá que Federer era mejor, y si pasa al revés dirán que Rafa era mejor. Disfrutemos de los dos que tenemos, porque vale la pena. Uno es tan diferente del otro, que eso nos ha dado mucha vida al tenis.
P. Me imagino que está al tanto de lo que la ATP ha decidido con respecto al comportamiento de Nick Kyrgios. ¿Cuál es su opinión?
R. Al final, dentro de un circuito tiene que haber unas conductas y unas normas que tenemos que seguir todos, y obviamente este chico está al límite de muchas de ellas. Sinceramente, creo que si hacen eso igual le hacen un favor a él.
Si yo fuera director de la ATP a mi «shows» así no me gustan mucho. Me gusta más el que da el cien por cien por el tenis, aunque sea menos vistoso, pero que todo lo que haga sea positivo, un cariño a un niño, una buena palabra para el otro, que no te enfrentes con rivales «de boca», que la gente no vea eso.
Creo que la rivalidad Federer-Nadal nos ha enseñado mucho como para que tengamos que estropearlo ahora con cosas de estas.