¿Qué significa ser hijo de Dios?, por María García de Fleury - 800Noticias
800Noticias
Religión

Por: María García de Fleury

Cuando alguien te dice que «eres hijo de Dios», ¿Qué significa eso para ti?, ¿Lo aceptas?, ¿Quién es ese Dios a quien llamamos padre? . Hay quienes ven a Dios como un anciano que está allá afuera, a quien hay que tenerle miedo.

Hoy la palabra Padre está muy manipulada, se está manipulando el significado de la palabra Padre de manera de que no la entendamos, y, ¿Cómo entender que Dios es amor sin saber quién es?, ¿Cómo entender el amor de Dios sin entender al Padre?, ¿Cómo pretender vivir en un mundo mejor si desconocemos las cosas esenciales?.

La solución para el mundo es el cambio, pero no del mundo, porque el mundo ha llegado a un punto que no puede cambiar, se ha alejado tanto, tanto, de la luz de Dios y ha cometido actos tan abominables que ya ha firmado su destino.

Sin embargo, hay una respuesta y esa respuesta eres tú, tú puedes cambiar, solo tú eres el responsable de tu propia vida, tú eres quien tiene que darle una respuesta a Dios y solo tú. Tú eres quien debes hacerlo, tú eres quien tienes que cambiar, ese cambio comienza con dos palabras: «Buscar a Dios», tienes una sola llave para abrir la puerta del corazón de Dios y esa llave es el deseo de buscarlo.

Puedes tenerle miedo a muchas cosas, puedes estar confundido respecto a una serie de cosas y en lo que concierne a Dios, todos estamos confundidos respecto a muchas cosas, pero lo más importante es que tengas ese deseo de conocer a Dios, desear conocer a Dios. Lo único que Dios está esperando son esas dos palabras que pasen de tu mente a tu corazón: ¡Deseo conocer a Dios!.

Dios sabe que tú no eres capaz, y yo tampoco, de hacer ese salto cuántico para entenderlo. Él solo está esperando que le digas: «Tengo deseos de conocerte», entonces algo increíble sucede. Se te da un don gratuito, es el Espíritu Santo, él abre esa puerta y dice claramente: «Ey, hay condiciones y reglas si quieres reconocer a Dios dentro de tu corazón».

Si quieres establecer ese «ser hijo de Dios como tu padre», tienes que entablar un diálogo con Dios, ese diálogo es la oración desde el corazón.

Conversa con Dios, de lo que te gusta, lo que te preocupa, lo que sueñas, lo que deseas. Hazle preguntas y así empiezas el camino a tu relación con Dios. Si te tomas el tiempo cada día de conversar con Dios, te darás cuenta que eso es lo más importante que puedes hacer en tu vida: Hacer tiempo para Dios, cada día, día a día, para tener esa relación con tu padre, hablando con Dios desde la profundidad de tu corazón.

Lo que más ama tu padre es escucharlo hablar como hijo a su padre, y al hacerlo día a día, de repente, te darás cuenta que esa relación está ahí, y te das cuenta en tu corazón que Dios existe y te ama. En ese momento todo cambia. ¿Cómo puede haber miedo cuando sabes que Dios está contigo?, ¿Cómo podría cualquier cosa de este mundo sobrepasarte cuando Dios está caminando contigo?, y, en ese momento, te das cuenta que Dios está contigo y tu vida cambia porque con Dios, siempre ganamos.