¿Por qué insistir en la Catequesis?, por María García de Fleury
María García de Fleury
Estamos en la Semana de la Catequesis. Aunque internacionalmente el Día del Catequista se celebra el 21 de agosto, pues fue el Papa Pio X el gran impulsor de la catequesis y a quien se le llama el santo patrono de todos los catequistas del mundo, en Venezuela también se ofrece la Semana de la Catequesis, preparándose para iniciar el nuevo año escolar.
¿Por qué insistir en la catequesis? Bueno, amigos, porque necesitamos crear una cultura católica que toque lo más profundo del ser humano, tanto en los niños como en los jóvenes y en los adultos. Porque la catequesis no puede reducirse a la simple enseñanza de los contenidos de la fe.
El catequista necesita saber que el fin de toda catequesis es transmitir un modelo de vida, que es Jesucristo, y fomentar una amistad personal con aquel que nos creó, nos redimió y está muy presente en nuestras vidas.
Los objetivos reales de la catequesis es situar a la persona en lo que significa la verdad de sí mismo, de lo que significa responder al llamado dado por Dios, para tener una fórmula de vida en donde encontremos nuestra propia felicidad.
En caso de duda, los criterios teológicos deben prevalecer sobre los pedagógicos, nunca al revés, recordando que el catequista no es el profesor de una materia determinada, ni de filosofía, ni de religión, en el sentido amplio de la persona, sino de la palabra.
Los catequistas somos transmisores eficaces de una revelación que viene de Dios a través de la Sagrada Escritura y la tradición de la Iglesia, y que, iluminados por el Magisterio, contando con la asistencia del Espíritu Santo, vamos llevando la Palabra de Dios. Obviamente, la catequesis comienza por el testimonio. Jesús dijo, En eso conocerán todos que son discípulos míos, si se aman los unos a los otros.
Y esto hace que incida en la cultura, que transforme las sociedades, porque la catequesis debe de aportar modelos de comportamiento. Jesucristo y los santos son verdaderos estereotipos positivos. Es necesario hablar de la dimensión sobrenatural del ser humano y brindar, aunque sean simples reivindicaciones sociales.
Los medios de comunicación son muy necesarios saberlos utilizar en la catequesis, porque ellos crean opinión, imagen, cultura. Toda catequesis está llamada a plantear ideas fundamentales claras.
El mejor punto de referencia es el catecismo de la Iglesia Católica, de manera de dar bases sólidas, porque se trata de forjar principios, convicciones.
Todo esto de las canciones, los juegos, son muy buenos, pero jamás sustituyen el aprendizaje formal de las enseñanzas básicas de las palabras de Cristo en el Evangelio, de los sacramentos, los mandamientos, integrando la gran visión de Dios del ser humano y del mundo que ofrece el cristianismo.
Es necesario que quede muy claro que la voluntad de Dios es lo primero en la vida de cada persona, que debemos vivir el mandamiento del amor a Dios y a los hombres como la primera ley. Por todo esto, la catequesis debe completarse con la liturgia y con la vida sacramental.
Finalmente, y lo más importante de todo, y muy necesario, es tomar en cuenta en la catequesis el sentido cristológico, eclesiológico y escatológico, siendo muy conscientes que no se puede hacer catequesis sin Dios, porque Él es el centro de todos, y con Dios siempre ganamos.
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