¿Por qué algunas personas se cambian el look durante la cuarentena?
800 Noticias
Un servicio que parecía no ser tan importante durante los días de cuarentena fue el que entregaban las peluquerías al look de las personas. Sin embargo, para sorpresa de muchos, las solicitudes para cortes, teñidos y masajes capilares han llenado listas de espera en los locales de varios países.
Pero, ¿por qué algunos buscan estos cambios en la apariencia física después de haber pasado semanas en sus casas? ¿Qué pasa con la autoestima en medio de la crisis sanitaria?
Autoestima ante la pandemia
María Paz Altuzarra, psicóloga de Clínica Universidad de los Andes, explica que estos cambios de look que buscan algunos en la cuarentena se puede deber a que cada uno está acostumbrado a tener una imagen y verla distinta puede afectar. «Me miro al espejo y esa imagen no corresponde a cómo yo estoy acostumbrado a verme, y eso de alguna manera me afecta. Me impulsa a ir a cortarme el pelo», agrega.
Sin embargo, Altuzarra cree que la decisión de ir o no a la peluquería puede estar basada en distintas razones. Una de estas es el hecho de darse un gusto para uno mismo. «Otros pueden tomarlo como: ‘Quiero arreglarme para verme bien. Siento que me veo mal en esta situación o hacerme algo que haga verme más bonita’», ejemplifica.
Ante las decisiones de cambios radicales que algunos han tomado, la psicóloga explica que estos tienen que ver con «la sensación de que si yo hago un cambio radical en mi imagen, estoy haciendo un cambio radical en mi vida».
«Como estamos en esta situación de incertidumbre de alguna manera puede ser un intento de lograr una sensación de control sobre mí misma«, indica. Respecto a cómo puede verse afectada la autoestima en estos días, Altuzarra cree que cada persona reacciona distinto y que no se puede generalizar.
Sin embargo, el estar tanto tiempo en las casas, saliendo poco, algunas veces arreglarse menos, no vestirse , no peinarse, no maquillarse, puede afectar la imagen de cada persona. Además, el distanciamiento social, en que las fuentes de gratificación más importantes que tienen los seres humanos, la relación e interacción con otros, se pierde. El sedentarismo o el hecho de estar comiendo cosas que no estaba acostumbrados y son menos saludables, también afectan la imagen y el ánimo.
Esto, agregado al hecho de que se está cambiando el hábito del ejercicio físico, lo que puede «hacer que uno se siente cada vez menos atractivo/a», indica. Sin embargo, el hecho de ir o no a la peluquería a algunos les puede servir en torno a la imagen de sí mismos. Pero para otros puede solo ser una «gratificación inmediata, más que a largo plazo«, concluye.