París SG se gana el derecho a soñar
Londres, Reino Unido | AFP | El París SG por fin tuvo el miércoles la gran noche europea que legitima sus ambiciosas aspiraciones: eliminar al Chelsea en los octavos de la Champions, mostrando un corazón y un juego admirable, es una recompensa para todos los estamentos del club.
A la vuelta de la derrota en diciembre ante FC Barcelona (3-1), el catarí Nasser Al-Khelaïfi, presidente del PSG, mostró su enfado y comentó que esperaba que se tratase de la «última derrota de la temporada».
Todo eso contrasta con la emoción que vivió ayer en Stamford Bridge: celebrando la clasificación con los aficionados que viajaron a Londres y dando un abrazo sincero al técnico Laurent Blanc, mientras saltaban festejando la gesta.
«Es magnifico, histórico para nosotros», explicó el dirigente parisino. Es un éxito que tendrá un doble impacto en el famoso «proyecto» catarí en el PSG.
Desde la llegada de QSI (Qatar Sports Investments) a los mando del club en verano (boreal) de 2011, el PSG invirtió cerca de 500 millones de euros (530 millones de dólares) en traspasos, y una eliminación en octavos tras dos años cayendo en cuartos hubiera significado un gran fracaso.
El PSG de QSI por fin encontró su partido de referencia, su hazaña legendaria. «Para mí, está al nivel del PSG-Real Madrid de 1993 (4-1)», dijo Pierre Ducrocq, excentrocampista del equipo y ahora comentarista para la radio France Bleu 107.1.
La venganza de Blanc
«Pienso que este partido será una referencia para el club durante los próximos años (…) el cuerpo técnico, que tiene toda la responsabilidad en las derrotas, también tiene algo de mérito en esta victoria».
Cansado pero feliz, Blanc no se olvidó de recordar todas las críticas que le vienen acompañando durante toda la temporada en la capital francesa.
Llegó en 2013 al PSG tras el rechazo al puesto parisino de algunos grandes nombres del banquillo, el exseleccionador de los Bleus está en buena posición para completar una temporada que podría ser histórica.
En lucha por el triplete nacional -2º en Liga, finalista de Copa de la Liga y en semifinales de Copa-, Blanc sobrevivió al duelo frente al portugués Jose Mourinho.
Tras la polémica rueda de prensa del portugués -señalando la dureza de las faltas parisina-, una nueva eliminación hubiera sido devastadora para Blanc. Sin embargo, con esta victoria Al-Khelaïfi no tiene dudas: «Blanc batió a Mourinho».
Los jugadores también quisieron alabar al técnico, incluido el capitán Thiago Silva. «Es la victoria del entrenador. Ha tomado buenas decisiones, buenas sustituciones, Preparó muy bien el vídeo del partido. Para nosotros estuvo increíble», dijo el brasileño.
La respuesta de los brasileños
De repente, vemos con otros ojos los 50 millones de euros (53 millones de dólares) desembolsados por el PSG para hacerse con los servicios del central brasileño David Luiz.
Sospechoso habitual de mal posicionamiento en defensa y de ser indisciplinado para el puesto que ocupa en el campo, el exjugador del Chelsea hizo un partido el miércoles lleno de corazón y rabia.
Marcó en el minuto 86 cuando todo parecía perdido y mantuvo al PSG a flote. Además, resistió todo el partido a las continuas provocaciones del delantero hispanobrasileño Diego Costa.
A su lado, Thiago Silva que supo mantenerse fuerte pese a conceder un penal durante el tiempo extra.
Tras el naufragio del Mundial de Brasil, dos meses de ausencia por lesión y una vuelta difícil, el exmilanista está volviendo a ser «O Monstro».
«Los mejores partidos están por venir. Si jugamos como hoy podemos llegar lejos», declaro el capitán parisino después del partido.
El desafortunado Ibrahimovic alabó «el gran corazón» de sus compañeros. Presumiblemente, Thiago Silva y David Luiz estarán más que satisfechos por el halago.
