Pablo Aimar volvió a jugar en River Plate casi 15 años después
15 años. Recuperado de una lesión que lo marginó largo tiempo de las canchas y que lo obligó a una doble intervención quirúrgica, ingresó al campo de juego a los 30 del segundo tiempo, en reemplazo de Pisculichi. Se mostró movedizo y tiró dos lujos, ante la ovación del estadio.
Al término del partido, señaló: «Sentí mucho ahogo, mucho nervio, mucho toda. Esas sensaciones, todas lindas. Por eso extrañás todas esas cosas del fútbol». También se refirió a sus hijos, que estaban en la cancha: «Les debe haber parecido rarísimo. En la cancha que ellos han ido a verme no se vive así el fútbol». «Soy conciente de la vida que he llevado, de que un día se termina y por eso intento disfrutarlo todos los días», agregó.
El último partido de Aimar había sido el 17 de diciembre del 2000, en la derrota de River contra Lanús por 3 a 2. Su último gol fue ante Almagro, el 3 de diciembre de aquel año. En tanto, el último partido en el Monumental databa del 10 de diciembre, en la igualdad por 1 a 1 ante Huracán.
Fuente: La Nación