#OPINIÓN | San Juan Eudes y los eudistas, por María García de Fleury
María García de Fleury
En Francia, durante el siglo XVII, vivió San Juan Eudes, a quien vamos a conocer como el fundador de la congregación Sagrado Corazón de Jesús y María, también conocida como los eudistas. Este año están celebrando cincuenta años de la provincia en Venezuela.
Juan Eudes nació en 1601 en una familia muy católica que le narraba a sus hijos la vida de Jesús y los enseñaba a confiar en Dios y en la virgen.
Se cuenta que cuando Juan tenía nueve años, un compañero lo abofeteó y en vez de responderle de la misma forma, Juan se acordó del consejo de Jesús y le presentó la otra mejilla. El compañero se quedó tan impresionado que dejó la agresividad.
Estudió en el colegio de los jesuitas y luego estudió teología e ingresó a la Congregación del oratorio, fundada en 1611, cuya finalidad era promover la perfección sacerdotal y predicar el Evangelio.
Juan se ordenó sacerdote en 1625 y de allí en adelante se dedicó a evangelizar como misionero apostólico en muchos pueblos y ciudades de Francia. Tenía una característica muy especial: después que predicaba se sentaba a confesar. Estaba convencido que la predicación movía los corazones, y el sacramento de la confesión comprometía a la persona a cambiar de vida y vivir cercano a las enseñanzas de Jesucristo. La gente decía de él: «¡Predica como un león y confiesa como un corderito!».
Después de mucho orar, reflexionar y consultar, el padre Juan Eudes abandonó la congregación del oratorio en 1643 y decidió formar una asociación de sacerdotes diocesanos cuyo fin principal sería la creación de seminarios que enfatizaran la formación de un clero parroquial celoso. La nueva asociación quedó fundada el Día de la Anunciación, 25 de marzo de 1643, con el nombre de congregación de Jesús y María.
Sus miembros eran todos sacerdotes diocesanos y no estaban obligados por ningún voto. Bastaba que fueran a ser conscientes del compromiso de ser bautizados.
San Juan Eudes y sus cinco primeros compañeros se consagraron a la Santísima Trinidad como principio y fin de la santidad del sacerdocio. El distintivo de la congregación era: el amor al corazón de Jesús y el amor al corazón de la virgen María.
Juan Eudes siguió haciendo misiones. Fundó varias comunidades, entre ellas, la orden de Nuestra Señora de la Caridad del buen pastor para tener religiosas que acogieran y ayudaran formando en la fe y en oficios dignos a las mujeres y jóvenes maltratadas por la vida.
Dejó un legado de libros de oración y cartas de gran valor para la comunidad y la doctrina espiritual donde hablaba de amar el corazón de Jesús y a la virgen María.
Con aprobación del Papa escribió la liturgia para que se celebrara la primera fiesta del sagrado corazón de la virgen María, en 1648, y la del sagrado corazón de Jesús el 20 de octubre de 1672.
San Juan Eudes, ese gran maestro de espiritualidad de los sagrados corazones de Jesús y María, falleció el 19 de agosto de 1680 habiendo insistido y predicado en la Iglesia la importancia del bautismo que hace que seamos hijos de Dios y enseñando que con Dios, ¡siempre ganamos!
