Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, por María García de Fleury
Por María García de Fleury
La iglesia celebra hoy la fiesta de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, es un ícono de la Virgen pintado sobre madera de 21 x 17 pulgadas que muestra a la madre con el niño Jesús.
Fue pintado en un estilo plano característico de ícono y tiene una calidad primitiva, todas las letras son griegas, las iniciales al lado de la corona de la madre la identifican como La Madre de Dios. Las iniciales al lado del niño IC XC, significan Jesucristo. Las letras griegas en la aureola del niño OWU, significan «El que es», mientras que las estrellas sobre la cabeza y los hombros de María Santísima indican su virginidad antes del parto, en el parto y después del parto.
Las letras más pequeñas identifican al ángel a la izquierda como San Miguel Arcangel. El Arcangel sostiene la lanza y la caña con la esponja empapada de vinagre, instrumentos de la pasión de Cristo. El ángel a la derecha es identificado como San Gabriel Arcángel y sostiene la cruz y los clavos. Es interesante ver que los ángeles no tocan los instrumentos de la pasión con las manos sino con el paño que los cubre.
El niño observa con rostro de miedo a los arcángeles Gabriel y Miguel, quienes le están mostrando los instrumentos de su futura pasión, se agarra fuerte con sus dos manos a la madre santísima, quien lo sostiene en sus brazos. El susto y el movimiento brusco del niño están expresados por la contorsión de las piernas, el repliegue del manto y en el hecho de que la sandalia del pie derecho queda suelta y colgando.
El origen de este ícono es incierto, se cree que es del siglo XIII o del siglo XIV, parece ser copia de una pintura de Nuestra Señora, que según la tradición, fue pintada por San Lucas. El cuadro recuerda la maternidad divina de la Virgen y su cuidado por Jesús desde su concepción hasta su muerte.
La Virgen del Perpetuo Socorro es la patrona de los padres redentoristas y su ícono original está en el altar mayor de la iglesia de San Alfonso María de Ligorio.
Hoy la Virgen cuida de todos sus hijos que acuden a ella con plena confianza, la devoción a nuestra Señora del Perpetuo Socorro crece cada día más y está en todas partes del mundo, concretamente en Venezuela gracias al trabajo de las misiones populares, la pastoral parroquial y la labor de los padres y las madres redentoristas, las hermanas Oblatas y las hermanas misioneras del Perpetuo Socorro.
Está difusión de la devoción ha generado que a solicitud de feligreses las autoridades eclesiásticas hayan construido iglesias y santuarios en su honor, además son muchas las archicofradías, sociedades, grupos y comunidades bajo el patrocinio de nuestra Madre del Perpetuo.
Este ícono muestra como Jesús se aferraba a su madre para que lo protegiera; en estos tiempos pidámosle a la Madre de Dios como Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, imitemos a Jesús quien se aferraba a su madre para ayudarlo en los problemas y angustias, así que ella nos ayude en estos problemas y angustias. Jesús es Dios y con Dios ¡siempre ganamos!
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