Nictofilia: causas, síntomas y tratamiento
Redacción 800 Noticias
La nictofilia es la atracción hacia la noche. No está catalogada como una patología, pero sí es una condición problemática por los efectos que puede tener para la salud. Privarse de buena parte de la luz del sol y realizar actividades a contramano de lo usual tiene sus consecuencias.
Se habla en sentido estricto de nictofilia cuando una persona elige de manera libre estar despierta hasta altas horas de la noche. Quienes trabajan en turnos no lo hacen por placer, sino por las exigencias laborales.
Cuando una persona presenta nictofilia, no necesariamente debe recibir un tratamiento. Tampoco es obligatorio que cambie su estilo de vida.
¿Qué es la nictofilia?
La nictofilia es una condición que se caracteriza por una atracción fuera de lo común por la noche y por la oscuridad. No se considera un trastorno y tampoco está incluida en ninguno de los manuales diagnósticos de psiquiatría.
Como tal, no se puede considerar como un problema. Pese a esto, sí es posible que detrás de este tipo de comportamiento haya alguna dificultad. Quizás tenga que ver con algún trastorno del sueño o con obstáculos para adaptarse a la vida social.
Cada caso es diferente y por eso se deben valorar las circunstancias en las que vive una persona con nictofilia. Si esto no le causa ningún inconveniente, se puede hablar de una simple preferencia.
Causas
Uno de los elementos más reveladores para evaluar la nictofilia es la causa que la provoca. Esta conducta puede tener orígenes muy diversos, que es necesario catalogar para saber si se trata de una dificultad a resolver o de un estilo de vida que se ha optado en libertad.
Patrón del ritmo circadiano
El ritmo circadiano es un ciclo biológico por el que se regulan las horas de sueño y de vigilia. Lo usual es que las personas se activen más en las mañanas y se desactiven por las noches, coincidiendo con la presencia del sol. Sin embargo, y por razones que la ciencia desconoce, algunas personas presentan un patrón diferente.
Algunos hábitos nocturnos son esporádicos y aparecen por una razón concreta. Las causas de la nictofilia son variadas.
Rasgos psicológicos
Las personas con un elevado coeficiente intelectual (CI) tienden a activarse más por las noches. No se conoce la razón por la que esto ocurre. De igual manera, quienes son introvertidos encuentran la noche más atractiva, en la medida en que la vida social es mucho menos intensa a esas horas.
Alteración de hábitos
Las personas que no tienen una rutina estructurada suelen desarrollar hábitos muy flexibles de sueño y de alimentación. En principio, hay una tendencia a dormir tarde y despertar tarde también. Si a esto se suma la ausencia de compromisos en las mañanas, con frecuencia se desemboca en nictofilia.
Situación aversiva
Es posible que exista algo durante el día que genera rechazo en una persona. Al estar despierta en la noche, busca evitar ese estímulo negativo.
Así mismo, un trauma de infancia ocurrido durante la noche puede generar una fijación de alerta a esas horas. Sería un efecto del estrés postraumático.
Síntomas de la nictofilia
En tanto no se trata de una patología como tal, tampoco se puede hablar de unos síntomas generales. Lo que sí se puede hacer es reseñar las características que son indicativas de esta condición y que resultan problemáticas:
Deficiencia de vitamina D: la exposición al sol es fundamental para la producción de esta vitamina. Su carencia afecta el estado de ánimo, pero también el sistema óseo y el inmunitario.
Dificultades sociales: cuando una persona tiene pocos o ningún contacto social en razón al hábito de permanecer despierta en la noche, se trata de una situación que debe ser valorada por un profesional.
Problemas laborales: la dificultad o imposibilidad para cumplir con los compromisos laborales es un indicador de que la nictofilia es inconveniente.
Privación del descanso: si el amor por la noche lleva a tener menos horas de descanso o a un sueño poco reparador, también hay un problema.
Si la nictofilia deriva en cansancio extremo para realizar las actividades del día, entonces hay que encontrar una solución.
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Tratamientos disponibles para la nictofilia
La nictofilia no requiere de tratamiento si no causa inconvenientes para el desempeño social o laboral, ni afecta la salud física en forma significativa. De lo contrario, es necesario consultar con el médico para encontrar caminos que lleven a superar esta condición.
Lo prioritario sería consultar con un psicoterapeuta. Este profesional valorará cada caso y estará en capacidad de detectar los problemas. La presencia de trastornos del sueño o de alteraciones significativas del ritmo circadiano pueden derivar en la prescripción de fármacos.
En términos generales, lo más saludable es dormir en las horas de la noche y estar despierto durante el día. Por más atracción que haya hacia lo nocturno, conviene moderar los hábitos. La nictofilia es una forma de vida aceptable, siempre que no provoque consecuencias dañinas.
Con información de Mejor con Salud
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