¡Necesitamos maestros!, por María García de Fleury
Por María García de Fleury
Definitivamente, no pudiéramos ser mejores sin maestros dedicados que trabajen desinteresadamente por mejorar nuestras vidas, hay gente que piensa que en nuestra generación actual un maestro no tiene importancia porque todo lo que puede enseñar, internet lo puede decir, pero un maestro tiene un papel importante en la formación de un ser humano individual, en la creación de una sociedad, una nación y el mundo en general, de hecho la importancia de los maestros se ha multiplicado porque se les ha quitado la carga de entregar información, ya no es solo una grabadora que lee algo y transmite cierta información.
El maestro es alguien que contribuye en la formación y en la vida de un estudiante inspirándolo a mejorar como ser humano, a mejorar sus capacidades, a desarrollar interés en temas particulares.
La función del maestro es hacer que el alumno sea reflexivo, capaz de analizar. Los maestros y profesores pueden cambiar vidas, pues ayudan a superar los desafíos en el camino, guían, allanan el camino para que niños y jóvenes elijan sus propios caminos para convertirse en la mejor versión de si mismos en el futuro. Los maestros son fuente de inspiración y en muchos casos hay alumnos que siguen los pasos de sus maestros. Un maestro no necesita ser perfecto, pero debe tener conocimientos para brindar a los estudiantes de información correcta y ser considerado para poder tratar de comprender a cada niño pequeño, a cada joven a cada alumno.
Si se necesitan maestros en la escuelas a niños y jóvenes, los maestros son también muy importantes en la educación Continua para la vida y el trabajo, los adultos necesitan herramientas orientadas a lograr objetivos básicos, específicos e inmediatos, cómo obtener certificaciones, incorporación al mercado laboral, mejorar en su profesión, obtener ventajas profesionales e incluso participar activamente en la educación de sus hijos.
Los maestros enseñan estrategias educativas basadas en la motivación propia, el entusiasmo , el carácter, la fuerza de voluntad, la necesidad de adquirir conocimiento, experiencia tanto laboral como personal y la autonomía del estudiante adulto. Amigos, la enseñanza es la única profesión que crea a todas las demás profesiones, por eso los maestros desempeñan un papel fundamental en la vida de todos y cada uno de estudiantes, un buen maestro es un tesoro que hay que apreciar y valorar.
Concluyo con lo que le dijo un grupo de jóvenes a su maestra: «Para el mundo puede ser que sea su maestro más, pero para nosotros eres nuestro héroe. Te respetamos por lo que has estado haciendo por nosotros a lo largo de estos años, sabemos que no somos los mejores estudiantes, pero tú eres el mejor maestro que podríamos pedir. Gracias por aceptarnos tal como somos y por amarnos tanto».
Amigos, si vamos aún más lejos, recordemos que Dios envío a su Hijo Jesucristo al mundo a salvarnos y eso lo hizo en gran parte convirtiéndose en el maestro, como lo llamaban todos y si esa fue la profesión de Salvador del mundo, esa es la mejor profesión, porque con Dios ¡siempre ganamos!
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