MotoGP llega al rápido Spilberg para el Gran Premio de Austria

EFE

El español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) se enfrenta este fin de semana a un complicado reto, intentar doblegar a las Ducati Desmosedici en su feudo inexpugnable del circuito Red Bull de Spielberg, escenario del Gran Premio de Austria de MotoGP.

Apenas lleva dos años en el calendario del campeonato del mundo pero el circuito de Spielberg, aún siendo propiedad del fabricante austríaco KTM, se ha mostrado como el trazado más adaptado a las características de las Ducati Desmosedici, que ganaron en 2016 con el italiano Andrea Iannone y lo hicieron con el también italiano Andrea Dovizioso en 2017.

Por este motivo y por la reciente victoria del propio Andrea Dovizioso en Brno, se antoja complicado el objetivo de Marc Márquez de incrementar su ventaja en la clasificación provisional del mundial, aunque ya el pasado año logró el mejor tiempo de entrenamientos, pero luego «perdió» el mano a mano final con Doviziozo por menos de dos décimas de segundo.

Sin embargo, los test realizados por todos los equipos tras el Gran Premio de la República Checa han resultado muy fructíferos para algunos equipos, entre ellos el Repsol Honda, que tuvo en Marc Márquez a su mejor hombre y a Dani Pedrosa también como uno de los protagonistas destacados de la jornada.

En cualquier caso, la undécima cita del campeonato del mundo de MotoGP de 2018 se antoja un mano a mano, nuevamente, entre los dos pilotos de Ducati, Andrea Dovizioso y Jorge Lorenzo, que aunque en público aseguran no tener ningún problema el uno con el otro, en realidad su «pique» personal se prolongará durante toda la temporada -la última del español con el fabricante de Borgo Panigale- y el campeón en título de MotoGP y líder del mundial, Marc Márquez.

Quienes continúan sin dar muestras de poder pelear de «tú a tú» tanto con Ducati como con la Repsol Honda de Márquez, son los pilotos de Yamaha, el italiano Valentino Rossi y el español Maverick Viñales, al que unos malos entrenamientos en Brno le dejaron rápido fuera de carrera, en la primera vuelta, mientras que Rossi aguantó con el grupo de cabeza mientras el ritmo fue lento, pero en cuanto «apretaron» sus rivales se tuvo que conformar con verlos ir.

Y la jornada de test no aportó nada nuevo. Ya avisó Rossi que sólo iban a probar pequeños detalles y así fue, como evidencia la séptima plaza conseguida, a poco más de siete décimas de segundo del piloto más rápido, sin que ni siquiera participara Maverick Viñales, todavía dolorido de su caída en carrera.

En el circuito de Red Bull le tocará sufrir nuevamente a los pilotos de Yamaha, que quizás tendrán en el francés Johann Zarco a un referente a la hora de lograr la mejor puesta a punto para un trazado que sin tener grandes complicaciones no es de los que más les favorezca.

Por ser su trazado de referencia y por el hecho de que en él iban a disponer de nuevo e importante material, los pilotos de KTM tenían en Spielberg una gran oportunidad de destacar, pero la caída de Pol Espargaró, el mejor de los representantes de la escuadra austríaca, en la que se produjo la fractura de la clavícula izquierda, que no precisó finalmente intervención quirúrgica, y una importante contusión cervical, que afortunadamente tampoco fue a mayores y que fue la lesión que realmente preocupó a los médicos, han mermado las condiciones físicas de quien estaba llamado a destacar en el «Red Bull Ring».

Pol Espargaró es otra de las noticias del fin de semana al ser baja para la carrera de «casa», con lo que la evolución de la RC 16 tendrá que esperar, pues inicialmente estaba previsto que hubiese novedades en esta cita de Austria para intentar lograr cuanto antes una moto competitiva a la altura de la competencia, pero la ausencia del español y también del piloto probador, el piloto finlandés Mika Kallio, que se lesionó durante el Gran Premio de Alemania, deja al británico de Oxford como única referencia para continuar el trabajo con la moto.

Los pilotos oficiales de Suzuki, el italiano Andrea Iannone y el español Alex Rins, serán otros de los protagonistas con opción a destacar, el primero porque ya venció hace dos años en este escenario y el segundo por sus ganas de volver a estar en el podio, que ya ha pisado en dos ocasiones, tercero en Argentina y segundo en Holanda.

Quienes no parecen estar en disposición de dar un «susto» a sus rivales y acercarse al podio son los pilotos oficiales de Aprilia, el español Aleix Espargaró y el británico Scott Redding, a los que les falta mucho trabajo por delante para conseguir que la RS-GP sea verdaderamente competitiva y se muestre al nivel de sus rivales.

Álvaro Bautista y Tito Rabat, sobre sendas Ducati Desmosedici GP17, buscarán nuevamente estar entre los diez primeros siempre y cuando les respeten las caídas y las averías mecánicas, la última de las cuales, la rotura del escape, le supuso la retirada al barcelonés, en tanto que su caída de entrenamientos no impidió al de Talavera de la Reina concluir noveno en Brno.