LVBP promete torneo con grandesligas a un mes de inicio

EFE

Un campeonato pleno de peloteros venezolanos que juegan en Grandes Ligas en Estados Unidos es la mayor promesa que ofrece la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) a un mes para el inicio de la zafra 2016-2017.

La afición venezolana concentra su expectativa en ver nuevamente uniformados en un mismo torneo, con los colores de los equipos locales, a jugadores como Miguel Cabrera, Félix Hernández, Salvador Pérez, Francisco Rodríguez, José Altuve o Carlos González en una temporada de béisbol que iniciará el 6 de octubre.

La razón para soñar que esto es posible, independientemente de las restricciones que MLB impone a sus peloteros para participar de las ligas de invierno, es la realización en marzo de 2017 de la cuarta edición del Clásico Mundial de Béisbol promovido por la organización estadounidense.

Para los directivos de Grandes Ligas existe la necesidad de realzar el espectáculo del Clásico Mundial, que todavía no está consolidado tras ser creado en 2005, y para ello los jugadores deben presentarse al torneo en buena forma física a fin de que la disputa deportiva aumente su nivel y atractivo.

El mánager de la selección de Venezuela, Omar Vizquel, también es partidario de que los peloteros entrenen durante los meses de receso de Grandes Ligas entre octubre y febrero, y que disputen juegos en la LVBP para llegar a tono por lo que ha conseguido que algunos de ellos ya hayan confirmado su participación.

El lanzador de los Marineros de Seattle Félix Hernández ha sido uno de los primeros en confirmar su incorporación a los Navegantes del Magallanes, a partir de diciembre fecha en la que la mayoría de los grandesligas se estarían sumando a los equipos locales.

Además de los que actualmente militan en equipos de la MLB, también hay un grupo de jugadores que han visto poca acción, han pasado lesiones o incluso fueron relegados a las ligas menores que verían con interés volver a uniformarse en Venezuela.

Estarían en esa condición el tercera base de los Medias Rojas Boston Pablo Sandoval, el receptor Miguel Montero de los Cachorros de Chicago o los lanzadores Franklin Morales de los Azulejos de Toronto y Henderson Álvarez de los Atléticos de Oakland.

Temporada soñada con escasez de dólares

Otra de las posibilidades para esta campaña es volver a ver en la lomita con Magallanes al abridor, dos veces ganador del premio Cy Young, Johan Santana quien no ha podido concretar su regreso a las Grandes Ligas tras operarse el hombro.

Las negociaciones entre los ocho clubes venezolanos que integran la LVBP y los equipos de MLB para acordar la participación de los peloteros aún está abierta y las confirmaciones son pocas por el momento, sin embargo, en Venezuela ya se empiezan a perfilar nóminas de lujo.

Para los actuales campeones Tigres de Aragua la presencia del ganador de la Triple Corona, Miguel Cabrera, de los Tigres de Detriot es suficiente, pero también se frotan las manos pensando que podrían tener a Martín Prado (Marlins Miami), Marwin González (Astros Houston) o Eduardo Escobar (Mellizos de Minnesota).

Magallanes juntaría a Hernández, Santana, Sandoval y Montero, así como a José Altuve (Astros Houston) o Rougned Odor (Rangers Texas).

Los Tiburones de La Guaira concentrarían también una buena parte de los mejores grandesligas venezolanos del momento con Salvador Pérez (Reales Kansas City), Francisco ‘Kid’ Rodríguez (Tigres Detroit), Alcides Escobar (Reales Kansas City), Gregor Blanco (Gigantes San Francisco), además de Henderson Álvarez.

Los Leones del Caracas esperan por Carlos Carrasco (Indios Cleveland) o Gerardo Parra (Rockies Colorado), las Águilas del Zulia por Carlos González (Rockies Colorado) o Yangervis Solarte (Padres San Diego), mientras que Caribes de Anzoátegui por Víctor Martínez (Tigres Detroit) u Omar Infante (Reales Kansas City), entre otros.

No obstante, la temporada de ensueño de la LVBP para los aficionados tendrá un costo en dólares elevado para la LVBP en medio de un país en crisis económica y control de cambio, por lo cual han requerido al gobierno la liquidación de divisas para costearlo y aún están a la espera.