La ONU declara tregua olímpica para Pekín 2022
EFE
La Asamblea General de la ONU ha declarado este jueves la tregua olímpica para Pekín 2022 desde siete días antes del comienzo de los Juegos Olímpicos, el 4 de febrero de 2022, hasta siete días después del final de los Juegos Paralímpicos de invierno, informa el Comité Olímpico Internacional.
La resolución, titulada «Construir un mundo mejor y más pacífico a través del deporte y el ideal olímpico», fue adoptada este jueves por consenso y copatrocinada por 173 estados miembros en el 76 período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York.
La resolución «subraya la importancia de la cooperación entre los estados miembros para aplicar colectivamente los valores de la tregua olímpica en todo el mundo, y destaca el importante papel del Comité Olímpico Internacional, el Comité Paralímpico Internacional y las Naciones Unidas a este respecto», agrega el COI.
También expresa «la expectativa de que los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022 sean una oportunidad significativa para aprovechar el poder del deporte para hacer avanzar el mundo, al fomentar una atmósfera de paz, desarrollo, resiliencia, tolerancia y comprensión, y dar la bienvenida a todas las delegaciones de los Comités Olímpicos y Paralímpicos Nacionales que participen» en los mismos.
Asimismo, la resolución «hace un llamamiento a todos los estados miembros para que cooperen con el Comité Olímpico Internacional y el Comité Paralímpico Internacional en sus esfuerzos por utilizar el deporte como herramienta para promover la paz, el diálogo y la reconciliación en zonas de conflicto durante y después del período de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos».
«El COI acoge con gran satisfacción el gran apoyo a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Invierno de Pekín 2022 por parte de todos los estados miembros de la ONU, expresado a través de la adopción por consenso de la Resolución de Tregua. Este es un gran reconocimiento de la misión de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de unir a los mejores atletas del mundo en una competición pacífica, y estar por encima de cualquier disputa política», dijo el presidente del COI, Thomas Bach.
Durante el debate sobre la resolución, el COI estuvo representado por su miembro y observador permanente del organismo olímpico ante la ONU, el colombiano Luis Alberto Moreno. Éste pronunció el discurso del Presidente del COI, que no pudo estar presente debido a la actual situación de pandemia.
En el discurso, el presidente del COI subrayó la importancia de la paz y la solidaridad en nuestro mundo dividido: «Al adoptar esta resolución, ustedes apoyan la misión de los Juegos Olímpicos de unir a los mejores atletas de deportes de invierno de todo el mundo, sin discriminación alguna, en una competición pacífica y respetuosa. Este vínculo de nuestra humanidad compartida es aún más relevante en nuestro mundo polarizado de hoy».
«Sólo podremos cumplir esta misión si los Juegos Olímpicos se sitúan por encima de todas las diferencias políticas, culturales y de otro tipo. Esto sólo es posible si los Juegos Olímpicos son políticamente neutrales y no se convierten en una herramienta para conseguir objetivos políticos», continuó.
La tregua olímpica tiene una historia de 3.000 años, que se remonta a cuando los antiguos griegos establecieron la «Ekecheiria» -una tregua sagrada- para permitir la participación en los Juegos Olímpicos de todos los atletas y espectadores de las ciudades-estado griegas, que por lo demás estaban casi constantemente en conflicto entre sí.
En el discurso también recordó a la Asamblea General de la ONU las consecuencias de la pandemia y los retos a los que se enfrenta el mundo en la actualidad. «Esto nos ha enseñado una lección: sólo podemos ir más rápido, sólo podemos apuntar más alto, sólo podemos ser más fuertes, si trabajamos juntos. Por eso el COI modificó el lema olímpico y lo convirtió en: Más rápido, más alto, más fuerte, juntos». La palabra «juntos» nos dice: Necesitamos más solidaridad. Más solidaridad dentro de las sociedades y más solidaridad entre las sociedades. Porque: no hay paz sin solidaridad», concluyó el presidente Bach.
