La obsesión por masticar hielo puede traer un significado médico
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Aunque parezca algo inofensivo el hielo es bastante duro, incluso para los dientes, ¿Quizás alguna vez hayas masticado? Si este es tu caso tal vez estés padeciendo de una enfermedad que no sabías.
Esta práctica es muy común en la gente, porque en muchos casos es una adicción, obsesión y ganas descontroladas por comer hielo, incluso en días muy fríos el cual puede ser los síntomas de una enfermedad silenciosa que puede pasar por alto.
Este padecimiento es causado por la deficiencia de hierro en el organismo: nos referimos a la anemia. Las ganas de masticar hielo pueden ser síntoma de esta enfermedad.
Las personas que sufren carencia de hierro, como los pacientes que tienen anemia, pueden experimentar un gran bienestar al masticar hielo. El frío alivia las pequeñas inflamaciones que se forman en la boca y que son provocadas por la falta de este mineral.
Además del hielo, es posible que se tenga deseo por comer otras sustancias inusuales, como tierra o pasta cruda, según informó Mayo Clinic.
A este fenómeno se le identifica como «pica» y describe el deseo de comer y masticar sustancias que no tienen ningún aporte de valor nutricional.
La anemia es más común en niños menores de 3 años, mujeres embarazadas o que están en la menopausia. Sin embargo, puede afectar a personas de cualquier edad.
Con información de Vix
