La «Champions» se decide en el Coliseum
EFE
La pelea por la última plaza que da derecho a participar en la próxima edición de la Liga de Campeones vivirá un capítulo más en el Coliseum Alfonso Pérez, donde el Getafe, quinto clasificado, recibirá al Sevilla, cuarto, en un duelo decisivo por las aspiraciones continentales de ambos.
De los dos equipos, el Getafe tiene algo más de presión. Una derrota ante un rival directo como el cuadro andaluz podría evaporar el sueño «Champions» de los hombres de José Bordalás, que, después, la próxima semana, recibirán al Real Madrid en otro duelo que será trascendental.
Por tanto, el Getafe iniciará frente al Sevilla su semana clave en una de sus mejores temporadas de la historia. Aún puede superar al equipo de Míchel que quedó en la sexta plaza en la temporada 2009/10 con 58 puntos, siete por encima de los que tiene ahora el club madrileño y récord absoluto de la entidad azulona.
Bordalás tendrá que pelear contra sus múltiples bajas en defensa. El técnico alicantino ha tenido tres contratiempos el pasado fin de semana que trastocarán sus planes en una de sus zonas más fuertes del equipo.
Primero, el portugués Vitorino Antunes se lesionó de gravedad durante el partido frente al Valladolid; después, el uruguayo Mathías Olivera fue expulsado en el mismo partido y no podrá jugar contra el Sevilla; y, finalmente, su compatriota Damián Suárez vio la quinta cartulina amarilla y tendrá que cumplir un encuentro de sanción.
Además, a esas bajas se podría unir la del francés Dimitri Foulquier, que es duda por problemas físicos y que podría dejar aún más huérfana a la línea defensiva del Getafe. De momento, Leandro Cabrera sustituirá a Antunes y Olivera en el lateral izquierdo y Bordalás confía en poder contar con Foulquier para no tener que hacer más experimentos.
Pero Bordalás, visiblemente molesto por las informaciones que le situaban en el Sevilla la próxima temporada, no quiere pensar demasiado en la Liga de Campeones y sólo quiere centrarse en el partido siguiente. Este, ahora, no es otro que el Sevilla, el más importante del club madrileño en los últimos tiempos.
El renacido Sevilla, que desde que Joaquín Caparrós sustituyó en el banquillo a Pablo Machín ha sumado doce de los quince puntos en juego, ha redoblado su moral, por los más que tres puntos de la pasada jornada en el derbi ante el Betis, de cara al viaje a un feudo que tradicionalmente se le atraganta y frente a un equipo que este curso es una de las revelaciones del torneo.
En este caso, la formación hispalense llega al Coliseum Alfonso Pérez tras romper una mala trayectoria como visitante, ya que se le resistía la victoria desde el pasado septiembre y con Caparrós se ganaron los dos últimos desplazamientos -Espanyol (0-1) y Valladolid (0-2)-.
El precedente de esta temporada entre ambos equipos se remonta a los albores del campeonato, cuando en la cuarta jornada el equipo de José Bordalás se impuso por 0-2 en el Sánchez Pizjuán al de Pablo Machín.
Entonces el Sevilla venía de perder en el Benito Villamarín (1-0) ante el Betis y la derrota en casa ante la formación madrileña abrieron las primeras dudas en el entorno del club andaluz.
Caparrós prepara el partido con las bajas por lesión del medio francés Maxime Gonalons y del delantero luso André Silva, quienes ya se perdieron el derbi.
Además, el centrocampista Pablo Sarabia también se queja de una sobrecarga muscular, aunque el ex del Getafe descansó en la sesión del viernes por precaución.
Bajas seguras son el defensa austríaco Maximilian Wöber, con una fractura de menisco, y el extremo Manuel Agudo ‘Nolito’, en la fase final de su recuperación de una rotura de peroné, así como el central portugués Daniel Carriço, sancionado por acumulación de tarjetas amarillas.