Kobayashi se corona emperador de Austria y Alemania
EFE | Foto referencial
El japonés Ryoyu Kobayashi entró en la historia al anotarse la LXXII edición del Cuatro Trampolines, tras acabar segundo en la estación austriaca de Bischofshofen (Salzburgo), una prueba que ganó el austriaco Stefan Kraft, líder de la Copa del Mundo; competición para la que también puntúan las pruebas del prestigioso torneo de saltos de esquí nórdico.
Kobayashi, de 27 años -que en los Juegos Olímpicos de Pekín 2022 ganó oro en el trampolín normal; y plata, en el largo- y vencedor de la ‘Vierschanzentournee’ hace dos temporadas y en la edición 2018-19 (con un ‘Grand Slam’: triunfando en todas y cada una de las rampas), lo hizo esta vez sin victoria alguna y tras acabar segundo las cuatro pruebas de un torneo que se anotó con un total de 1.145,2 puntos, 24.5 más que el alemán Andreas Wellinger, quinto este sábado en Bischofshofen.
Kraft -que sumó su sexto triunfo de la temporada, al ganar este sábado por delante de Kobayashi y del esloveno Anze Lanisek- acabó el Cuatro Trampolines en tercera posición, con 1.112.7 unidades.
El astro nipón inscribió su nombre, con letras de oro, en la historia de los saltos de esquí nórdico. Se coronó, el Día de Reyes, nuevo emperador de Austria y Alemania, los países organizadores del famoso torneo navideño; que siguen sumando ediciones sin festejar a un triunfador local.
El espectacular Ryoyu entró en el selecto club de triples ganadores del Cuatro Trampolines, en el que se unió a Helmut Recknagel -de la extinta República Democrática Alemana (RDA)-, al noruego Björn Wirkola y al polaco Kamil Stoch, único de los citados que sigue en activo y que este sábado finalizó vigésimo primero.
Por delante. Kobayashi ya sólo tiene, en la lista histórica de vencedores, al germano Jens Weissflog -que repartió sus cuatro éxitos finales entre la RDA (1983-84 y la temporada siguiente) y la República Federal de Alemania (en 1991 y en el 96)- y al plusmarquista absoluto: el finlandés Janne Ahonen, quíntuple ganador de un certamen en el que festejó éxitos el Día de Reyes de 1999, 2003, 2005, 2006 y 2008.
Al campeón del lejano Oriente le bastó este sábado con mantener a raya a Wellinger, primer líder del torneo al ganar la prueba inaugural, en Oberstdorf; antes de salir en cabeza de Alemania después de la segunda etapa, el Día de Año Nuevo y en Garmisch-Partenkirchen, asimismo en Baviera.
El primer día de 2024 el que ganó fue Lanisek -quinto en la general final, por detrás de otro austriaco, Jan Hörl- y a Wellinger le bastó ser tercero para mantener el primer puesto en el ‘Vierschanzentournee’. En una jornada en la que Kobayashi empezó a afilar su ‘katana’ con otro segundo puesto que lo dejaba a sólo 1.8 puntos de la cima del torneo; en una prueba que lideraba al acabar la primera ronda y que fue interrumpida un par de veces, a causa del viento, antes de que ejecutara su segundo salto.
Ryoyu asestó el primer golpe en Innsbruck, donde Hörl se convirtió en el primer austriaco en ganar en la rampa olímpica del Bergisel en los últimos once años; y Wellinger no pasó del quinto. En la capital del Tirol, el astro nipón acabó segundo y se colocó al frente de la septuagésima segunda edición del prestigioso torneo navideño.
Kobayashi entró en Bischofshofen con 4.8 puntos de ventaja sobre Wellinger, que aún no había dicho su última palabra; y con 23.6 sobre Hörl, que era tercero, en espera de un muy mal día de los anteriores. Kraft -que llegó al Cuatro Trampolines con cinco triunfos en las primeras ocho pruebas de la Copa del Mundo- era cuarto, mucho más distanciado, a 33.8 unidades.
El espectacular saltador japonés, ya había metido presión al dominar la calificación del viernes, que Wellinger acabó noveno. Y este sábado la incrementó en la primera ronda de una prueba que se disputó en medio de una preciosa nevada.
El japonés protagonizó el salto más largo de la primera manga, de 137 metros; y se fue al decanso con 144.1 puntos, 1.2 más que Kraft, que -con medio metro menos que Kobayashi- era segundo. En un prueba en la que Wellinger (132 metros) prácticamente se despedía de sus opciones de ganar la estatuilla del Águila de Oro, al acabar octavo la ronda, a 14.2 puntos del astro asiático.
Wellinger acabaría quinto -por detrás de otro austriaco, Manuel Fettner- este sábado, por lo que Alemania se tuvo que conformar con el segundo puesto en un torneo que no gana desde que lo hiciese por última vez (la edición de 2001-02) Sven Hannawald: el primero que lo hizo con un ‘Grand Slam’; sólo repetido desde entonces por Stoch (en 2018) y por Kobayashi, un año después.
Austria, que no gana el torneo desde que lo hiciese en 2015 Kraft, se conformó con la victoria de éste, que volvió a hacer sonar el ‘Land der Berge’ tres días después de que lo hiciese, asimismo en territorio nacional, Hörl.
Pero el gran triunfador fue Kobayashi, que, de nuevo con maestría, pero sin arriesgar en su salto final, sucedió en el historial al noruego Halvor Egner Granerud, que había tirado por la borda cualquier posibilidad de repetir victoria final al no pasar el corte en ninguna de la dos primeras pruebas; y que este viernes recuperó en parte su estado de forma al concluir séptimo en Bishofshofen.
Fue Granerud el encargado de entregarle el ‘Águila de Oro’ a Kobayashi, flojo en el arranque de la temporada y que, con sus cuatro segundos puestos en los pasados diez días, ya es tercero en la Copa del Mundo, a 318 puntos de Kraft, que lidera la general con 909.
En total, con 212 puntos más que Wellinger, segundo en la competición de la regularidad, que se reanudará el próximo fin de semana en la estación polaca de Wisla.
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