Freddy García planea retirarse al terminar temporada
Nota de Prensa.- Dos décadas en el beisbol son suficientes para Freddy García. El derecho piensa retirarse este año, una vez termine la temporada de la LVBP. La idea había estado rondando su cabeza.
“¿Hasta cuándo lanzaré? Creo que hasta este año”, soltó el mirandino, de 39 años de edad, antes del segundo encuentro de la semifinal, entre Tigres y Tiburones, en Estado Universitario. “Me voy para México a jugar y me retiro. Hay momentos en los que dices: ya. Debes estar con la familia”.
El veterano trata el tema del retiro sin mucho afán. No quiere hacer ruido con eso, pese a ser el tirador venezolano con más victorias en las Grandes Ligas (156) y a guardar en su vitrina de trofeos un anillo de Serie Mundial, con los Medias Blancas de Chicago, en 2005.
Prefiere enfocarse en el ahora y seguir adelante. Todavía tiene un trayecto por recorrer, antes del adiós definitivo. García, que tiene una oferta para ir a la Liga Mexicana de Beisbol durante el verano boreal, sigue tratando de ayudar a los felinos, aunque esta su camino haya estado signado por los altibajos.
La campaña anterior brilló con Aragua, tras llegar en un cambio proveniente del Magallanes. Pero en la 2015-2016, no ha podido replicar aquel éxito. Su promedio de carreras limpias ha estado por encima cinco, tanto en la eliminatoria como en la postemporada. Algo que espera cambiar.
“Trato de hacer mi trabajo, pero no he lanzado como he querido,”, admitió. “El primer juego (del playoff contra Bravos) no fue como esperaba. En la segunda apertura pude hacer buenos pitcheos y controlar a Margarita en una serie bastante reñida. Esos muchachos nunca se rindieron. Nos costó ganar, pero pasamos a la segunda ronda”.
García enfatizó que sus resultados no tienen que ver con el agotamiento por una larga campaña, que incluyó viajar a Asia para representar a Venezuela en la Copa Mundial Premier 12, y quiere terminar la temporada fuerte. “No estoy cansado. Espero seguir así”, destacó.
Desde hace años, luego de una cirugía y algunos problemas en el brazo, García dejó de ser un lanzador que reta a los contrarios con una portentosa recta. Ahora depende de la localización de sus envíos y del respaldo de la defensa del equipo que tenga detrás.
“Yo lanzo de todo. Hasta la pezrrubia si es necesario (risas). Slider, curva, splitter, cambio, sinker, dependiendo de cómo se encuentre el encuentro”.
El sábado, en el cuarto partido de la semifinal contra La Guaira, tendrá que echar mano de todo ese repertorio. De su actuación podría depender colocar la serie a favor de los bengalíes 3-1 o igualarla 2-2.
“La clave para enfrentar a la ofensiva de Tiburones es mantener la bola bajita y hacer buenos pitcheos en las cuentas favorables. Es importante tratar de sacar los outs cuando te pones en dos strikes. Pienso que eso es lo que nos ha pasado, que no hemos podido terminar a los bateadores. Cuando eso pasa, el que sale mal parado es el pitcher. Hay que atacar a los bateadores”.
Con cada partido, se acerca más al final, por eso tratará de aprovechar cada una de sus salidas y seguir siendo una buena influencia en el dugout.
“Bueno, claro. Cada vez que puedo trato de ayudar. Si notas que está pasando algo, hablas con ellos (los jóvenes), pero puede ser al revés. En este equipo somos muy unidos y comunicativos”.
Sin embargo y pese a toda su sapiencia, García no vislumbra un futuro como técnico.
“Lo más seguro es que siga ligado al beisbol, pero no creo que como coach”, afirmó. “No es fácil un trabajo como ese. Eso quiere decir que tienes que llegar primero que los peloteros (risas). He jugado demasiada pelota para retirarme y luego volver al terreno como técnico. No creo. Al menos no por ahora”.