España consigue su quinta medalla de oro en Río

El Mundo

Saúl Craviotto y Cristian Toro han abierto el cajón de los regalos para el equipo olímpico español. Después de que Sete Benavides se quedase a 21 milésimas del podio media hora antes, la pareja española del K-2 200 metros ha cumplido los anuncios y ha atrapado un oro, la octava medalla patria en estos Juegos que apuntan ya al final.

Quinto oro para España, tantos como la vez que más desde Barcelona’92, donde el anfitrión estableció su inalcanzable tope, 13. En una prueba que dura apenas 32 segundos, los españoles salieron mal, pero en el ultimo 100 completaron la remontada y ganaron con comodidad. Una sensación nueva para Toro, ex concursante de ese programa de televisión llamado Mujeres y Hombres y Viceversa.

Nacido en Venezuela pero criado en Lugo, ha sido ahora la compañía de Craviotto, dueño ya de un palmarés tremendo: antes de lo de hoy ya era oro en Pekín (K200 500 metros) y plata en Londres (K1 200). Sólo cuatro españoles antes habían alcanzado medallas en tres Juegos diferentes: el ciclista Joan Llaneras, el palista David Cal, el jugador de balonmano Demetrio Lozano y la tenista Conchita Martínez. Craviotto es el quinto elemento de ese ránking de longevos campeones, un gigante del deporte español, que además puede alargar su museo, con una cuarta presea, que peleará en su prueba individual (K1 200).Saúl, veterano, policía en Gijón y nacido en Lérida, y otro, Cristian, el joven, que cuando acaben los Juegos quiere prepararse la oposición para lo mismo. Lograron la plaza a última hora, en el preolímpico de Duisburgo, en mayo. Pareja (deportiva) desde el pasado noviembre, el suyo ha sido un viaje corto y con final feliz.