¡El último duelo! Boca y River definen el campeón de la Copa Libertadores
Panorama del Zulia
Final de la Copa Libertadores, River Plate-Boca Juniors. Buenos Aires es un hervidero. Sudamérica está expectante. El planeta aguanta la respiración.
El estadio Monumental será testigo de la historia hoy, desde las 4:00 pm venezolana (transmisión de Fox Sports), cuando uno de los dos gigantes argentinos se corone frente a su eterno rival.
La ida finalizó 2-2 en La Bombonera, en un duelo que terminó con una leve ventaja anímica para los Millonarios, por sobreponerse en el campo contrario.
A orillas del río de La Plata, un día después del programado –cambio obligado por la lluvia- Ramón “Wanchope” Ábila y Darío “Pipa” Benedetto anotaron por el conjunto local, mientras que Lucas Pratto y Carlos Izquierdoz (en propia puerta) lo hicieron por la visita.
“Quedan 90 minutos. No ganamos en nuestra cancha, pero sin duda que vamos a dejar la vida para salir campeones en la cancha de River”, apuntó el técnico xeneize, Guillermo Barros Schelotto. “Que la gente se quede tranquila, que vamos a dejar todo”.
Marcelo Gallardo, DT de los riverplatenses –que no estará en la línea de cal por sanción, pero sí en la tribuna-, lanzó: “El equipo respondió de muy buena manera en una cancha siempre complicada y compleja, y en una final”.
El duelo será arbitrado por el uruguayo Andrés Cunha.
Ambos equipos acuden con bajas sensibles: River no contará con el lesionado Ignacio Scocco y el suspendido Rafael Santos Borré, mientras que Boca no tendrá a Cristian Pavón, también por problemas físicos.
El drama se percibe en Buenos Aires. La locura colectiva. En Boca Juniors vivieron una “despedida” de leyenda, un entrenamiento a puertas abiertas con 50 mil fanáticos en La Bombonera, y casi 20 mil fuera del estadio. River Plate espera un lleno de más de 66 mil espectadores -recordando que se juega sin público visitante-. Y en el medio, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, las autoridades y las fuerzas públicas que esperan que la jornada culmine en santa paz.
Mientras River Plate luchará por hacerse de su cuarta Copa Libertadores, Boca buscará la séptima. Pero más allá de los números generales, está la gloria y la tristeza, infinitas ambas: ganar o perder frente al odiado rival.
Con información de: Panorama del Zulia