El Papa pide a países que deben pensar bien antes de devolver a inmigrantes
EFE
El papa Francisco afirmó que se «debe pensar muy bien» a la hora de devolver a otros países a los inmigrantes que llegan a Europa, al asegurar que conoce las torturas que sufren muchos de ellos.
Así lo expresó Francisco en la rueda de prensa a bordo del avión de regreso de su viaje a Irlanda cuando se le preguntó sobre la responsabilidad en Europa sobre el tema de inmigración y el reciente caso del barco militar italiano, Diciotti.
El pontífice respondió a los periodistas que viajan con él, entre ellos la enviada de EFE, que lo primero para gestionar la inmigración es «la apertura del corazón», después «la condición de la integración» y después «la prudencia de quienes gobiernan».
Reveló que ha visto un vídeo clandestino sobre lo que ocurre a los hombres que son devueltos y vuelven a caer en manos de los traficantes. «Es horroroso. A las mujeres y a los niños los venden y los hombres sufren las torturas más sofisticadas», lamentó.
«Para mandarles de vuelta se tiene que pensar bien, bien», agregó.
El pontífice argentino destacó también el valor de la integración a la hora de la acogida, y recordó que los terroristas del atentado en el aeropuerto de Bruselas habían nacido en el país de padres inmigrantes, pero nunca se habían integrado y «habían sido guetizados».
«Un pueblo que puede recibir, pero no integrar es mejor que no acoja y este es un punto del diálogo en la Unión Europea», agregó Francisco, quien instó a «continuar a hablar» en ámbito europeo.
Sobre el caso del barco Diciotti, que permaneció sin desembarcar con 150 inmigrantes a bordo, durante más de 10 días ante la negativa del ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, Francisco desveló que se resolvió, en parte, gracias a la Conferencia Episcopal italiana.
Explicó que parte del trabajo de mediación fue de una asociación católica, pero también de la Conferencia Episcopal Italiana, que se encargó de hablar con el ministro.
Cerca de un centenar, irán a la localidad de Rocca di Pappa, a pocos kilómetros de Roma, donde serán asistidos por la asociación «Mondo Migliore» y también Irlanda y Albania dieron su disponibilidad a acoger a una parte.
