El Barcelona ya hace cuentas para llevarse la Liga Española
EFE
El Barcelona ya hace cuentas, barrunta la fecha aproximada para certificar la consecución de un título considerado como suyo hace unas cuantas jornadas y al que se arrimó un poco más con la victoria obtenida ante la Real Sociedad (2-1).
El equipo de Ernesto Valverde solventa casi por inercia cada uno de los compromisos que le restan en el torneo, que puede dejar sentenciado el próximo fin de semana, si suma todos los puntos tanto el martes, frente el Alavés en Mendizorroza, como el sábado siguiente, en el Camp Nou contra el Levante.
Y eso que no cede el Atlético, vencedor en Eibar, en una competición a la que se aferra el Celta, que se afea para el Girona y que se oscurece para el Rayo Vallecano y el Huesca, cada vez más resignados al adiós.
El Barcelona, sin aspavientos, salió airoso de la visita de la Real Sociedad, que mantuvo el tipo en el Camp Nou (2-1). No brilló el conjunto azulgrana, centrado en el empeño de la Liga de Campeones más que en una competición por la que transita de carrerilla.
No necesitó el equipo de Valverde de la asistencia habitual de Leo Messi, ni del socorro a última hora de Luis Suárez. El central francés Clement Lenglet, en la última jugada de la primera parte, y Jordi Alba, que respondió al empate logrado un minuto antes por Juanmi, ventilaron el trámite liguero para mantener en nueve puntos la ventaja respecto a su primer perseguidor, el Atlético Madrid.
Y eso que el Atlético no decae. La fe le mantiene vivo en la competición. Independientemente del mayor o menor margen que establezcan los números el conjunto de Diego Pablo Simeone compite jornada a jornada. Hasta el final. El cuadro rojiblanco salió de Ipurúa con los tres puntos gracias a un gol del francés Thomas Lemar a cinco minutos del cierre.
Asentado en la segunda plaza contempla al Real Madrid, que recibe al Athletic el domingo, a siete puntos. No es un rival fácil el Eibar, sobre todo como local. Y por eso el Atlético tuvo que dejarse la piel para poder batir al cancerbero serbio Dmitrovic, quien evitó un resultado peor para su equipo.
El gol postrero de Lemar premió la insistencia y la disciplina del equipo de Diego Pablo Simeone en un partido que parecía abocado al empate sin goles.
Mientras, el empate en Vallecas entre el Rayo Vallecano y el Huesca aclara una pelea por el descenso en el que está ya involucrado, de lleno, el Girona, derrotado en Balaídos por el Celta, que se aleja de la zona crítica.
El conjunto gallego continuó con su escalada hacia la permanencia después de sumar su tercera victoria en las cinco últimas jornadas. El regreso de Iago Aspas tras cumplir en el Metropolitano su partido de suspensión volvió a ser providencial. Abrió el marcador que después igualó Portu y que desequilibró, definitivamente, el marroquí Sofiane Boufal.
Mientras el Celta toma aire y se aleja en tres puntos del Valladolid, antepenúltimo de la clasificación, el Girona afrontará el tramo final del curso metido en un lío. El conjunto de Eusebio Sacristán, que ha perdido sus cinco últimos encuentros, está a solo dos del descenso al que parecen condenados el Rayo Vallecano y el Huesca.
Sobre todo tras el empate sin goles en Vallecas, un marcador inservible para ambos, ocupantes de las dos últimas plazas de la tabla.
Era este un partido clave para ambos. Uno de los últimos cartuchos que quemar. Si había un momento decisivo, sin margen de error, era el de este sábado.
Desde el principio el partido envolvió un tinte de drama por la situación clasificatoria de ambos equipos, en descenso, separados por dos puntos y conscientes de que una derrota les dejaría con pie y medio en Segunda. Y así fue. Incapaces ambos cada fin de semana es más dramático para los dos. El Rayo queda a cinco del Levante, que marca la salvación. Siete distancian al Huesca.