Muguruza disputará la final de Dubai con Krejcikova
EFE
La española Garbiñe Muguruza mostró la misma capacidad de reacción de días anteriores, superó a la belga Elise Mertens, décima favorita y 18 del mundo, a la séptima bola de partido por 6-4 y 7-6 (5), y accedió por primera vez a la final del WTA de Dubai, su segunda en dos semanas y la tercera en general en este curso, donde tendrá como rival a la checa Barborac Krejckova.
Derrotada la semana anterior en la de Doha (cayó ante la checa Petra Kvitova), Muguruza tendrá una nueva ocasión para aumentar su cuenta de títulos, siete hasta el momento, aprovechando su actual gran momento de forma que le ha llevado ya a disputar tres finales en lo que va de año: Yarra Valley, Doha y ahora en Dubai.
En su tercera semifinal en Dubai (2015 y 2018) Muguruza no tuvo esta vez su saque como aliado como en el partido contra Arina Sabalenka. Falló con el primero, cometió ocho dobles faltas, y solo anotó un «ace». Pero a pesar de esta circunstancia luchó desde el fondo de la pista donde su rival manejó los tiempos con efectividad.
Mertens fue un auténtico muro. Su tenis defensivo y táctico le hizo salvar tres bolas de partido en cuartos contra Jessica Pegula, y trajo a maltraer a la española que tuvo que recuperarse de un 0-1 nada más empezar el encuentro, y que luego reaccionó con garra apuntándose los cuatro juegos siguientes (4-1) para dominar después 5-2, aunque cometió cinco dobles faltas.
Pero ahí es donde Mertens mostró su inquebrantable voluntad, y acortó diferencias con un juego variado e inteligente. Superó la belga un punto de set con saque de la española y quebró (5-4). Muguruza, fiel a su convicción, contraatacó luego, y con un resto ganador de revés paralelo se hizo con el primer parcial, en 55 minutos.
El segundo set comenzó como el primero, con una gran disputa del primer juego, con servicio de la española, que al final logró confirmarlo. La española logró situarse con 5-3 y servicio, e incluso tuvo una bola de partido, pero Mertens de nuevo se mostró inaccesible y logró quebrarle a continuación.
Tres puntos de encuentro más logró salvar Mertens (cuatro en total) en este segundo set, en el que se llegó al desempate. Allí Mertens, superó otras dos bolas de partido (quinta y sexta), Muguruza, más calmada se lanzó al ataque y a la séptima oportunidad, cerró el encuentro en la red, sumando su victoria 17 este año.
La española, novena favorita, se medirá en la final contra la checa Barborac Krejckova (n.63 WTA), que en la segunda semifinal se impuso a la suiza Jil Teichmann (n.54), entrenada por los españoles «Beto» Martín y Arantxa Parra, por 7-5 y 6-2, en 1 hora 45 minutos.
Krejckova, que afrontará su primera final de este 2021, y que aún no ha conquistado torneo alguno individual, pero es una gran especialista en dobles donde ha ganado siete torneos, entre ellos Roland Garros y Wimbledon, se mostró superior a una Teichmann que desaprovechó dos bolas de set en la primera manga.
Y es que el primer set resultó muy igualado, con ambas desde el fondo de la pista y conservado su saque hasta el undécimo juego, cuando Krejcikova se hizo con el de una Teichmann que, en el décimo al resto, había dejado escapar dos bolas para anotárselo. La castigó la checa, que con su saque se lo llevó, por 7-5.
La segunda manga tuvo un neto dominio de la checa, que ya se hizo con el saque rival en el tercer juego y, aunque inmediatamente lo perdió en el siguiente, volvió a romperlo en el quinto y en el sétimo. Krejcikova, en el octavo, sirvió para apuntarse el choque, pero le costó cerrarlo. Tuvo que esperar a la tercera oportunidad de que dispuso para plantarse en su primera final del año. Será el primer duelo entre Muguruza y la nacida en Brno hace 25 años.
