Coronación de la Virgen de Nuestra Señora de Coromoto
María García de Fleury
El 11 de septiembre de 1952 en las festividades de los 300 años de la aparición de la Virgen de coromoto, el Papa Pío XII mandó a que se le «coronara canónicamente».
La coronación canónica es uno de los ritos litúrgicos católicos instituidos para resaltar la devoción por una advocación Mariana donde un grupo grande de personas veneran de forma sincera a la Madre de Dios.
A través de esa imagen en el congreso Mariano realizado en barquisimeto en 1952 con motivo de los 300 años de la aparición de la Virgen de Coromoto y en vísperas de su coronación canónica, Don Mario Briceño Iragorry tuvo la responsabilidad de dirigir las palabras de orden y en su discurso llamado «María Caracas y la unidad de la patria». Dijo entre otras cosas «sin esperar el anuncio de la resurrección los hijos de los hombres vieron en María su puerta de esperanza en el testamento de Jesús, ella la única heredera la iglesia, los sacramentos, la llave de los cielos han sido entregados a los apóstoles María». Recibió las almas, a María se le confió el dolor de los hombres, estos saben que para ver el rostro de Jesús iluminado por los resplandores de la resurrección, María al jugar previamente las lágrimas que enturbian la mirada de los hijos del pecado.
Don Mario Briceño Iragorry agrega la exuberante geografía que fue surgiendo los ojos de Cristóbal Colón, se tornó en geografía Mariana, con el nombre dulce de María nuestro descubiertos y con atinado bautizo que invoca su gracia infinita surge nuestra patria a los planos de la historia.
Cuándo empiezan a fundarse nuestras ciudades las advocaciones de María santísima se toman por nombre de las nuevas comunidades la noche del 8 de septiembre de 1652, el modesto rancho aborigen se tornó en Templo mayor, de mayor magnificencia que el propio templo de Salomón. María bajo aquella noche en nuestro suelo para iluminar la ceguera de quién se negaba al dulce yugo de sulley y amor y ahí mismo como testimonio de su ilimitada misericordia quedó en manos del pecador convertido en frágil documento que al correr de los tiempos ha llegado ser corazón y palanca de la religiosidad nacional es un regalo sin precio.
Si bien fue el vestido de inmediato por la solicita autoridades religiosas se mantuvo por ciclos en el ámbito generosos de los llanos y comarcas occidentales, en su célebre templo de Guanare esperó largo tiempo nuestra Virgen morena a que la fe del pueblo le diera sitio de excelencia que le corresponde.
«En el orden Mariano, de la patria ella bajó para que lindo y el mestizo la tuvieran como madre legítima» concluyó Don Mario Briceño Iragorry diciendo «nacida para la relación política en el propio día de la Natividad Santísima de María. Venezuela tiene voz mayor para pedirle la constancia de su protección en el orden de la tranquilidad doméstica y en el orden de la comunidad exterior y entera en el disfrute de su tradición del país.
La devoción por la Santísima Virgen de Coromoto se celebra tanto el 8 de septiembre día de su aparición como el 11 de septiembre día de su coronación, porque ella es la Madre de Dios y con Dios siempre ganamos.
