«Beautyfood» ¿dieta o rutina cosmética?
Agencias
Las cremas ayudan, pero como se suele decir «la belleza está en el interior». La dieta para tener una piel joven y bonita se llama beautyfood. Una dermatóloga y una nutricionista de reconocido prestigio nos dan las claves de este antiaging que desde la alimentación pone al alza el aguacate, el tomate y los yogures. Alimentos que aportan luminosidad, previenen el fotoenvejecimiento, ralentizan el envejecimiento celular y mejoran la calidad de uñas y cabello.
En palabras de Gema Cabañero, directora de I+I+D de 180 The Concept: “se trata de un método de alimentación que se basa en disfrutar del placer de cocinar y comer recetas sencillas y ricas con las que beneficiar a la piel. Son alimentos que aportan luminosidad, previenen el fotoenvejecimiento, ralentizan el proceso de envejecimiento celular o, por ejemplo, mejoran la calidad de nuestras uñas y cabello.
¿Qué hace el aguacate?
Para nutrir y que la piel se vea más luminosa el aguacate es un alimento que se puede incluir fácilmente en nuestro día a día en ensaladas, tostadas y para dipear. En palabras de la experta “rico en ácido linoleico y grasas monosaturadas, ayuda a que la piel absorba todos los nutrientes beneficiosos y contribuye a que esta se vea más luminosa y lisa”. También el tomate de nuestros salmorejos y gazpachos ayuda a tener una piel con ‘glow’ y sin imperfecciones, pues “es una fuente de antioxidantes y aminoácidos que combaten la falta de luminosidad en la piel y ayuda a combatir la aparición de acné gracias a que regula la grasa de esta”, añade Gema.
Frutos secos y semillas
Para mejorar la hidratación, elasticidad y función barrera de la piel, la nutricionista Natalia Quintero recomienda tomar semillas, frutos secos y aceites vírgenes por ser fuente de vitamina E, antioxidante. Además, hidratarse con agua e infusiones ricas en polifenoles, como el té verde; o la calmante y antiinflamatoria manzanilla.
Para ralentizar el proceso de envejecimiento celular de la piel hay que tomar hojas verdes de espinacas y brócoli. “En el caso de las primeras, tienen un alto poder antioxidante gracias a su contenido en vitamina A y C que propicia la producción de colágeno, dotándola de mayor elasticidad. Por su parte, el brócoli, es una fuente rica en fibra y minerales que logra un efecto purificante y combate la oxidación de la piel, ralentizando el proceso de envejecimiento y glicación”, aclara Gema. Para las arrugas y la flacidez el alimento más beneficioso son las zanahorias. “Tienen un alto grado de vitamina A y betacaroteno que ayuda a prevenir arrugas, evitar la flacidez y, además, en verano son muy necesarias porque contienen propiedades fotoprotectoras”, añade Gema.
El consumo de probióticos como el yogur u otros fermentados, y de fibras prebióticas que encontramos en frutas, verduras, legumbres o cereales integrales, también es fundamental. Natalia Quintero destaca la microbiota del intestino como clave en una piel bonita. “Se está observando, además, una relación directa entre la buena salud de nuestra flora intestinal y una piel bonita, ya que la microbiota sana es capaz de sintetizar nutrientes (vitaminas y aminoácidos), que favorecen la renovación celular del órgano más grande del cuerpo (la piel)”, explica Natalia.
¿Qué hace el azúcar?
Al igual que podemos mejorarla, hay ingredientes como el azúcar que producen flacidez y tono apagado que debemos controlar. “El exceso de azúcar puede causar glicación, una reacción química natural cuando los niveles de azúcar en sangre superan lo que nuestra insulina procesa y que perjudica a la producción de colágeno y elastina, haciendo que nuestra piel se vea más apagada y menos tersa”, advierte Gema.
Los cafecitos de la mañana y de la tarde tampoco ayudan a la hidratación. La cafeína en exceso o la sal afectan inflamando la piel y dejándola seca y escamosa. El alcohol, a su vez, deshidrata la piel y dificulta su rehidratación dejándola realmente seca y desmejorada.
Por 20minutos
