Arrodíllate para que tengas fuerzas, por María García de Fleury - 800Noticias
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Soy María García de Fleury.

Frente a la cantidad de problemas, obstáculos, angustias en los que vivimos a diario, te invitamos a que imites al búfalo. Cuando la vida se te ponga a cuesta arriba, empinada, sucia, resbaladiza, llena de barro, llena de problemas, usa la doble tracción del búfalo.

Fíjate que el Salmo 92 en el versículo 10 dice, tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo. Sí amigos, porque el búfalo es uno de esos animales bovinos más fuertes que existen. Pueden llegar a pesar entre 700 y 1200 kilos.

En algunos lugares se utilizan como transporte para tirar arados, pues tienen una gran capacidad y una resistencia inmensa para cargar peso en sus hombros. Es interesante ver que cada vez que el búfalo lleva demasiada carga y el camino se le pone sucio, empinado, resbaladizo, el búfalo utiliza su doble tracción.

Esta doble tracción consiste en doblar sus patas delanteras, o sea, se pone de rodillas y empieza a subir, a subir, a subir. Se detiene por un momento, se vuelve a poner de rodillas y sigue subiendo, sube y sube. Se detiene por un momento, se vuelve a poner de rodillas y sigue subiendo y subiendo cada vez con más fuerza y más rápido hasta llegar a la cima.

La verdadera fuerza del búfalo está en ponerse de rodillas. Solamente así puede llevar con éxito el peso tan grande que tiene encima. Un peso que puede ser incluso mayor que su propio peso. En sus lomos está llegar a la cima y cada vez que tú y yo nos ponemos de rodillas nos volvemos más fuertes, más rápidos. Solo así podremos llegar hasta la cima.

Hay que aprender a usar la doble tracción del búfalo. Amigo, dobla tus rodillas, reza, ora, clama, pídele a Jesucristo. Él te dará la fuerza, la potencia, el vigor para subir hasta llegar a la cima. Cuando ya no puedas más y caigas de rodillas ante Dios, ahí es donde vas a obtener la victoria y vas a tener más fuerzas. Nada ni nadie va a poder detenerte.

Te invito a experimentar la fuerza sobrenatural que hay al ponerse de rodillas frente a Dios. Es tiempo de poner en práctica la doble tracción del búfalo. Ponernos de rodillas para hablar con Dios acerca de las cosas que te preocupan, que te angustian, los sueños que tienes, las cosas que te hacen felices. Es importante.

Jesús dijo, te basta mi gracia, mi mayor fuerza se manifiesta en la debilidad. Y San Pablo dijo, mejor me preciaré de mis debilidades para que me cubra la fuerza de Cristo. ¿Por qué? Porque Cristo es Dios y con Dios siempre ganamos.

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