#22May | Día de Santa Rita de Casia, la «santa de lo imposible»
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Cada 22 de mayo la Iglesia Católica celebra el día de Santa Rita de Casia, hija obediente, esposa fiel, esposa maltratada, madre, viuda, religiosa, estigmatizada y santa incorrupta. Conocida como Patrona de los necesitados y Santa de lo imposible.
Nació en Mayo del año 1381, un año después de la muerte de Santa Catalina de Siena. La casa natal de Sta. Rita está cerca del pueblito de Cascia, entre las montañas, a unas 40 millas de Asís, en la Umbría, región del centro de Italia.
Su vida comenzó en tiempo de guerras, terremotos, conquistas y rebeliones. Países invadían a países, ciudades atacaban a ciudades cercanas, vecinos se peleaban con los vecinos, hermano contra hermano. Los problemas del mundo parecían más grandes que lo que la política y los gobiernos pudieran resolver.
Tres datos de Santa Rita
1. Las abejas. Según indica una tradición, un grupo de abejas blancas se agrupaban en los labios de Santa Rita cuando era bebé. Ellas segregaban miel para alimentarla sin hacerle daño ni fastidiarla. Un campesino que vio a las abejas, las ahuyentó con su brazo, que se encontraba herido. Milagrosamente este sanó.
2. Conversión de su esposo. Sus padres le arreglaron un matrimonio con Paolo Ferdinando, con quien Santa Rita se encontraba enamorada. Sin embargo, no sabían que él era alcohólico, y que, ya casada con él, ella sufriría de muchos abusos. Siempre rezó por la conversión de su esposo. Finalmente, él pudo observar el testimonio de fe de su esposa y se convirtió al catolicismo. Sin embargo, los antiguos enemigos de Paolo, aun queriendo venganza por sus antiguas fechorías, lo interceptaron un día en su camino a casa y lo asesinaron.
3. Estigmas. En Cuaresma de 1443, un sacerdote llamado Santiago de Monte Brandone visitó la ciudad de Casia. Para ese entonces Santa Rita, después de la muerte de su esposo e hijos debido a una enfermedad, había decidido vivir como religiosa. Monte Brandone dio un sermón sobre la Pasión durante su visita. Este tocó tanto a Santa Rita, que a su retorno al monasterio donde vivía le pidió fervientemente al Señor ser partícipe de sus sufrimientos en la Cruz. En respuesta divina, ella recibió los estigmas y las marcas de la Corona de Espinas en su cabeza.
Oración a Santa Rita
Oh Dios, Quien en tu infinita ternura has sido bondadoso para escuchar la plegaria de Tu sierva, Santa Rita, y otorgas a su suplica lo que es imposible a la vista, conocimiento y esfuerzos, en recompensa de su compadecido amor y firme confianza en Tu promesa, ten piedad en nuestra adversidad y socórrenos en nuestras calamidades, que el no creyente pueda saber que Tu eres la recompensa del humilde, la defensa de los sin esperanza, y la fuerza de aquellos que confían en Ti, a través de Jesucristo, nuestro Señor. Amen
Con información de Aciprensa.com