Papa Francisco ordenó este domingo sacerdotes a 13 diáconos, entre ellos un venezolano, un chileno, un ecuatoriano y un brasilero, a los que pidió ser siempre misericordiosos con sus feligreses.
«No cierren nunca las puertas de la Iglesia en la cara de la gente. Por favor no hagan eso. Tengan misericordia», exhortó Francisco y agregó que «no son ustedes los dueños de la doctrina. La doctrina es del Señor».
Seis de los 13 sacerdotes, que se postraron rostro en tierra como parte del ritual de ordenación, proceden de Italia, y los demás vienen de Brasil, Chile, Ecuador, Pakistán, Corea del Sur, Venezuela y Vietnam.
El papa Francisco propone un enfoque más tolerante y pastoral que sus predecesores, afirmando, por ejemplo, que los sacerdotes deben bautizar a los hijos de parejas católicas no casadas y de madres solteras.
El sumo pontífice dijo también que la Iglesia católica no debe estar «obsesionada» con temas como el aborto, la anticoncepción y el matrimonio homosexual, aunque no pidió cambios en la doctrina católica sobre estos temas.
También Francisco dedicó hoy la oración del Regina Coeli, que sustituye en tiempo pascual al habitual Ángelus dominical, a las madres del mundo, en una jornada en la que se celebra en Italia el Día de la Madre.
Al contrario que en España, que está establecido que el Día de la Madre sea el primer domingo de Mayo, en Italia la tradición dicta que este Día sea el segundo domingo de este mes.
