Confirmada la eficacia de una nueva vacuna para la malaria - 800Noticias
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La malaria o ‘paludismo’ es una enfermedad causada por parásitos de la familia ‘Plasmodium’ que se transmiten a través de la picadura de mosquitos. Una enfermedad infecciosa que, lejos de pertenecer al pasado, se corresponde con una de las principales causas de mortalidad global. De hecho, y según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la malaria fue responsable de la muerte de 445.000 de personas solo en 2016, año en el que se registraron en todo el planeta más de 216 millones de casos. Y es que contraída la infección, los fármacos disponibles no parecen ser demasiado eficaces. Tampoco las numerosas vacunas ya desarrolladas para prevenir estas infecciones. De ahí la importancia de un estudio dirigido por investigadores de la Universidad de Yale en New Haven (EE.UU.), en el que se muestra cómo una vacuna que actúa directamente sobre una proteína empleada por los plasmodios para evitar la respuesta inmune es capaz, por fin, de proteger frente a la malaria. O así sucede, cuando menos, en modelos animales –ratones.

Como explica Richard Bucala, director de esta investigación publicada en la revista «Nature Communications», «cuando se administra esta vacuna con una proteína específica usada por el parásito de la malaria para evadir una respuesta inmune, entonces se induce una protección frente a la reinfección. Hasta donde nosotros sabemos, esto nunca se había hecho utilizando un único antígeno en una infección fulminante en la etapa sanguínea de la enfermedad».

Sistema inmune ‘desmemoriado’

El sistema inmune es el responsable de defender al organismo frente a los agentes invasores, ya sean externos –como los parásitos causantes de la malaria– o internos –caso de las células cancerígenas–. El problema es que los invasores también cuentan con mecanismos para contrarrestar la respuesta inmune y continuar su expansión. Concretamente, los plasmodios liberan una proteína que, denominada ‘factor inhibidor de la migración de macrófagos de Plasmodium’ (PMIF), es capaz de bloquear la actividad de los linfocitos T de memoria –las células inmunes encargadas de proteger al cuerpo frente a las reinfecciones–. En consecuencia, y dado que en ausencia de estos linfocitos el sistema inmune no recuerda quién es el enemigo, no puede combatirlo de forma eficaz cuando vuelve a aparecer –una y otra vez–. De hecho, es bien sabido que los pacientes solo desarrollan una respuesta inmune parcial frente a las reinfecciones, razón por la que siguen experimentando los síntomas de la enfermedad –en ocasiones, con consecuencias letales.

Por tanto, parece que lo primero que hay que hacer para prevenir las reinfecciones de la malaria es acabar con esta PMIF. Y eso es lo que los autores han tratado de hacer en este estudio. Así, en primer lugar, utilizaron una cepa del parásito genéticamente manipulada para eliminar PMIF. Y constatada la erradicación de la proteína, la administraron en un modelo animal –ratones–. ¿Y qué pasó? Pues que los animales produjeron linfocitos T de memoria y desarrollaron una respuesta inmune mucho más potente frente al parásito.

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