Xi llega a Pionyang con expectativa de avivar diálogo sobre desnuclearización
EFE
El presidente chino, Xi Jinping, aterrizó este jueves en el aeropuerto de Sunan, en Pionyang, en lo que supone su primer viaje a Corea del Norte y una cita marcada por la posibilidad de que su cumbre con el líder de ese país, Kim Jong-un, ayude a reactivar el diálogo sobre desnuclearización.
El Boeing 747 de Air China que transportó a Xi aterrizó en Sunan a las 11.40 hora local (2.40 GMT), según detalló el Diario del Pueblo, principal rotativo estatal chino, dando comienzo a su visita de dos días a la capital norcoreana.
Imágenes retransmitidas a su vez por la cadena surcoreana YTN mostraron la aeronave en la pista de Sunan y a funcionarios preparando el desembarco del presidente chino.
Dada la naturaleza opaca de ambos gobiernos, se desconoce la agenda exacta de la visita, pero se esperaba que Kim recibiera a Xi con una ceremonia que debía incluir guardia de honor.
Tras ello, sería trasladado al lugar donde se hospedará durante el viaje, Baekhwawon, la residencia para invitados de alto rango estatal donde han pernoctado tres presidentes surcoreanos, además de Hu Jintao (en 2005, cuando se produjo la última visita de un presidente chino) o el estadounidense Jimmy Carter, ya en calidad de expresidente.
Se desconoce a su vez si la cumbre entre Kim y Xi tendrá lugar hoy o el viernes.
No obstante, se sabe que Xi visitará la Torre de la Amistad Sino-Coreana, monumento situado muy cerca de la embajada china en Pionyang.
Se cree que también podría asistir a uno de los espectáculos de Gimnasia Masiva en el Estadio 1 de Mayo situado en la isla fluvial de Rungna.
Esta es la primera visita a Corea del Norte de Xi desde que accedió a la presidencia china en 2013.
Se cree que su visita podría dar impulso al estancado diálogo sobre desnuclearización de la península coreana tras la fallida cumbre de Hanói.
En un artículo de opinión publicado el miércoles en el principal diario norcoreano, el mandatario chino afirmó que su viaje contribuirá a «lograr avances» en este sentido y consideró «razonable» la postura de Pionyang en cuanto a desarme.
En la capital vietnamita, Pionyang abogó por una desnuclearización gradual acompañada del progresivo levantamiento de sanciones, mientras que Washington dijo que no relajaría sanción alguna mientras el régimen no elimine sus programas nuclear, de misiles y de armas químicas y biológicas.