María Elena Febres-Cordero preside el “Consejo Nacional de Laicos de Venezuela”, la principal organización de laicos del país. Coordina el trabajo de 31 movimientos y asociaciones católicas e impulsa la implicación de los laicos en la sociedad.
De ellos depende la organización Provida y la difusión de la Doctrina Social de la Iglesia.
“Es una labor que está referida de manera fundamental a la atención de tantos venezolanos que, por ejemplo, hoy requieren de asistencia humanitaria, acompañamiento”. recalcó Febres Cordero
“Cuando digo Iglesia no lo digo en un sentido sólo de los pastores, de los obispos, de los sacerdotes, de las Iglesias locales. Lo digo en el sentido del venezolano en sus diversos ámbitos en los que trabaja y donde le corresponde hacer una labor social”.
En Roma, María Elena Febres-Cordero ha preparado un plan de acción para aplicar la encíclica Laudato si’ en Venezuela. Y es que su organización quiere recordar que la solución a la crisis medioambiental depende de todos los sectores de la población.
